Cifuentes designa «diputados de proximidad» en 15 «circunscripciones»

Cristina Cifuentes ha puesto a su grupo parlamentario del PP en la Asamblea a hacer «trabajo de calle». Quiere que los suyos –acostumbrados a vivir en la abundancia de la mayoría absoluta y legislaturas cómodas– salgan de los despachos y se esfuercen por conocer de primera mano la realidad de la región. El objetivo: ganarse el voto en el cuerpo a cuerpo con los ciudadanos. Para ello, ha dividido el mapa de la Comunidad en 15 zonas geográficas que ha adjudicado por grupos de entre tres y seis políticos, los llamados «diputados de proximidad», siguiendo el modelo británico en el que cada representante electo defiende los intereses de su circunscripción y se juegan su reelección «puerta a puerta». La mayoría de los 48 parlamentarios populares ha sido asignado en una o varias zonas.

Madrid capital está dividida, a su vez, en 21 distritos. La idea es que cada uno haga su «agenda propia» y acuda asiduamente a la zona para entrevistarse con asociaciones, que visiten comercios y tengan mayor presencia en los medios locales. Hacerse más visibles.

Hasta ahora, el trabajo parlamentario en la Asamblea era puramente sectorial. Los diputados se especializaban en temas concretos –Sociedad, Educación, Infraestructuras...– que desarrollaban independientemente del municipio afectado. «Introducir la dimensión territorial es importante para pulsar la realidad de cada zona. La gente conoce a su alcalde, pero no a los diputados que defienden sus intereses en la Cámara regional», defiende Daniel Ortiz, exalcalde de Móstoles y coordinador de Municipios en el grupo parlamentario. Él es el encargado de dinamizar el trabajo de sus compañeros en esta nueva vertiente geográfica. El viernes pasado cerró la primera ronda de visitas de los nuevos «diputados de proximidad» por toda la región. Aunque de momento, reconoce, el «tour» se ha limitado al contacto con los alcaldes y concejales del PP en cada pueblo. «Hasta ahora primaba la distribución de tareas por temas, pero la presidenta ha dado instrucción clara de que hagamos trabajo de proximidad, que se resume en menos sede y más calle. Quiere que el diputado se convierta en referente del PP en la zona y actúe de nexo también con el Gobierno», dice Ortiz.

En esta doble vertiente –sectorial y territorial– viene trabajando el grupo socialista desde la pasada legislatura, aunque los veteranos admiten que no todos los compañeros cumplen con su función de guía en los pueblos. El PSOE no ha hecho una división geográfica del mapa, sino que directamente ha asignado a cada uno de sus 37 diputados varios de los 179 municipios de la Comunidad. Enrique Rico, secretario general del grupo parlamentario socialista, defiende este esquema no sólo para ganar mayor presencia, sino para «acercar el territorio»a la Cámara. «El trabajo es bidireccional. El diputado se acerca al territorio, y el territorio hay que acercarlo a la Cámara de representación, la casa de todos».

También Podemos, nuevo en la Asamblea, se ha organizado desde el principio por zonas y ha colgado en su web el mapa con los diputados adscritos a cada municipio. El mapa interactivo, con los datos de contacto de sus 27 políticos, ha tenido 1.021 visitas.

Ciudadanos, en cambio, apuesta por el tradicional esquema sectorial. «Es más operativo que un diputado especialista lleve Infraestructuras y acuda a cada municipio, no importa dónde. Lo otro exige más coordinación», señala César Zafra, coordinador de Ciudadanos en Madrid.

Convencida de que con este sistema la democracia gana en cercanía con el ciudadano, Cifuentes ha propuesto desde el Gobierno de la Comunidad una reforma legal para que la circunscripción única de Madrid se divida en varias áreas. Todavía no ha dicho cuántas. La oposición lo ha rechazado de plano porque cree que la actual organización de la Comunidad es la más representativa de España, la que mejor respeta el número de habitantes/voto y su traslación en escaños de la Cámara. El PP ya intentó subdividir el mapa electoral en la anterior legislatura, promoviendo un reparto en 43 circunscripciones, pero no cosechó el consenso obligado para «tocar» el Estatuto de Autonomía, que requiere una mayoría cualificada de dos tercios de la Cámara. De momento, PSOE, Ciudadanos y Podemos se cierran en banda a esta modificación del mapa electoral. Sospechan que los populares buscan así mejorar su posición electoral. En el Ejecutivo regional insisten en que abrirán la negociación con la oposición.

La división geográfica de la región en 15 zonas que sigue el grupo del PP no responde a su propuesta de división electoral, aseguran en el Gobierno. «Solo es una distribución interna. Coincide con la organización territorial del partido. No obedece a nada más», insiste Daniel Ortiz. En la lista de «diputados de proximidad»Cifuentes ha implicado a dos de sus consejeros con escaño, Ángel Garrido y Carlos Izquierdo, que representan al PP en los distritos de Villa de Vallecas y de Carabanchel, donde antes fueron concejales.