El Ayuntamiento pide a la Comunidad un protocolo anticontaminación más restrictivo

La edil de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés, ha detallado esta mañana las alegaciones del Gobierno local al protocolo marco contra la contaminación de dióxido de nitrógeno (NO2) elaborado por la Comunidad de Madrid. El Consistorio sugiere que los niveles máximos de activación sean como los de la capital (180, 200 y 400) y que haya «más concreción» en las medidas para el transporte público y sus tarifas en episodios elevados de polución.

La propuesta del Ayuntamiento remite al cambio hecho por el Gobierno regional en su protocolo. «Queremos recuperar, en la línea de las altísimas exigencias que impone la UE por incumplimientos reiterados, un plan más preventivo», ha declarado Sabanés. La premisa que defiende la concejalía de Medio Ambiente es que los límites de NO2 sean de 180 microgramos en nivel de Preaviso, 200 en Aviso y 400 en Alerta; no 200, 250 y 400 como defiende la Comunidad.

Entre las alegaciones también figura la de tener un «mayor control» de los coches más contaminantes en las inspecciones técnicas, ya sea a nivel autonómico o regional. Respecto a la revisión de las tarifas del transporte público, el Ayuntamiento se refiere tanto a la posible gratuidad como a la promoción de este.

«Si actuamos en 200 estamos penalizados por la UE», ha explicado la concejal de Ahora Madrid, que asegura no saber por qué el Ejecutivo regional ha cambiado el acuerdo inicial. «Ese cambio nos lleva a nuevos incumplimientos», ha añadido. No obstante, en el caso de que no se llegara a un consenso, el Ayuntamiento puede aplicar su plan contra la contaminación. En el último episodio, a finales de año, se llegó a un escenario 3, con restricción de circulación al 50% de vehículos según su matrícula, par e impar.

El grupo de Calidad del Aire de la Comunidad de Madrid en el que se discutió el protocolo acordó, el pasado 29 de abril, que lo mejor era mantener la línea del Gobierno de la capital. En el primer borrador, enviado a los entes locales el 30 de junio, se puso como límite los 180 microgramos de NO2. Sin embargo, el 22 de diciembre se presentó un nuevo escrito en el que se elevaban los niveles a los 200 y 250 microgramos, el baremo del anterior plan de Madrid.