Así es Almussafes gracias a Ford: el doble de población, un 8% de paro y la mitad del presupuesto municipal

La localidad valenciana de Almusafes apenas contaba con 4.000 habitantes en 1976, el año que Ford instaló en su término municipal la que hoy es la fábrica de coches más productiva y flexible de España. Cuatro décadas después el censo se ha duplicado y la actividad industrial generada por la firma del óvalo y su parque de proveedores ha sustituido a las tareas agrícolas de las que dependía Almusafes, que se ha convertido en uno de los pueblos más prósperos de España, con una tasa de paro del 8,5 por ciento, frente al 19,5 de la media española.

En los últimos tres años, Ford ha contratado a 3.000 personas. Muchas son del pueblo. El alcalde de Almusafes Toni González asume directamente la cartera de Empleo en un municipio en el que la falta de trabajo es menos problema que en el resto de la comarca, con catorce puntos menos de paro.

El Ayuntamiento de Almusafes cuenta para este año con un presupuesto de 14,7 millones de euros. De ellos, seis proceden de Ford: 3,3 millones a través del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y otros 2,6 por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).

Al margen de convertir a Almusafes en un pueblo rico, la firma estadounidense se ha erigido durante sus cuarenta años de permanencia en España en uno de los principales motores económicos y de generación de empleo del país. Un periodo en el que ha ejecutado inversiones por un monto superior a los 9.500 millones.

Ford emplea en la actualidad a 9.000 personas, pero su impacto va más allá. Un estudio elaborado por la Universidad Europea de Valencia eleva a 113.218 los puestos de trabajo, entre directos, indirectos e inducidos, que genera la actividad industrial de la firma en España.La planta de Almusafes cerrará el año con una producción de 400.000 vehículos.

A lo largo de las cuatro últimas décadas de su cadena de montaje ya han salido once millones de coches. Es la única fábrica de España que produce vehículos híbridos y en cinco años espera estar en disposición de sacar al mercado coches «autónomos sin volante ni acelerador».Otros 40 años más Este martes, la compañía celebró sus cuarenta años de presencia en nuestro país con el compromiso de su presidente y consejero delegado en España, Jesús Alonso, de «seguir como mínimo otros cuarenta años más».

La firma del óvalo, de hecho, ha ejecutado inversiones en el último lustro por importe de 2.300 millones de euros en la planta valenciana que le permiten albergar la fabricación de seis modelos diferentes. «Ford fue la empresa que más dinero invirtió en España durante la crisis», afirmó Alonso, lo que unido a la «flexibilidad de la factoría gracias a las buenas relaciones con los empleados» le garantizan la continuidad futura.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, celebró el anuncio de continuidad de Ford. No le faltan motivos para la alegría. El sector del automóvil (integrado por la fábrica de la multinacional y la industria auxiliar) genera el 25% de las exportaciones de la Comunidad Valenciana, con más de 7.000 millones de euros anuales. Más que los sectores hortofrutícola, cerámico y del plástico juntos. Ford vende su producción española a 150 países. Entre sus clientes se hallan los taxis de Nueva York.El informe presentado por el rector de la Universidad Europea de Valencia, Juan Morote, constata que la planta de Ford duplica la productividad media del sector en España, con veinticinco vehículos por empleado.

Los salarios, asimismo, son un veinticinco por ciento superiores a los de la competencia. Para Puig, Ford «representa el paradigma de la reindustrialización de la Comunidad Valenciana». De hecho, su actividad genera un efecto multiplicador. En España se generan 11,3 empleos por cada nuevo trabajo que crea Ford, que representa al 17,5% de la mano de obra de la industria de las manufacturas en la Comunidad Valenciana, donde constituye «un creador de industria en cadena con exigencias de calidad».La planta, que factura 25.000 euros por minuto, resulta un pilar básico del tejido industrial español. Así, cada euro de valor añadido generado por Ford en la Comunidad Valenciana supone la producción de 6,52 euros en el resto de España.

Más allá de sus impactos económicos en términos de Producto Interior Bruto (PIB), el estudio elaborado por la Universidad Europea de Valencia otorga a la planta de Ford la categoría de «organización transformadora» ya que, de acuerdo con el documento, «además de ser capaz de adaptarse a los cambios que se producen en su entorno, sabe influir decisivamente en la evolición del mismo». Así, su actividad exportadora ha propiciado el crecimiento del puerto de Valencia (líder en el Mediterráneo en tráfico de mercancías) y ha hecho necesaria la construcción de una terminal ferroviaria en la planta de Almusafes. Hoy, Ford representa el 80% de las exportaciones valencianas por ferrocarril y el 40% por vía marítima.