Educación

Castilla y León no quiere tener el examen «más duro» de Selectividad

El consejero de Educación pide una prueba ajustada a las de otras autonomías

El consejero de Educación, Fernando Rey ICAL

ALBERTO FERRERAS

El consejero de Educación, Fernando Rey, no quiere que el examen de la EBAU ( Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad ) de Castilla y León, anteriormente conocido como la Selectividad, sea «el más duro o el único más duro de todo el país» y, por ello, propuso ayer a los equipos técnicos que elaboran las pruebas de las distintas asignaturas que tengan en cuenta la situación de otras comunidades autónomas y pongan «un examen ajustado» a ello.

Al respecto, recordó que los grupos técnicos pueden tener en cuenta los instrumentos, las orientaciones y determinaciones oportunas que permitan que sin bajar el nivel de exigencia, ni el rigor y la seriedad de la prueba se valoren las situaciones de otras regiones. En cualquier caso, según aclaró Fernando Rey , no se trata de exigir menos porque «la ignorancia no es nunca una opción» . El consejero de Educación hizo una llamada a la tranquilidad a padres y alumnos porque del medio centenar de asignaturas únicamente se han planteado problemas con una, la de Historia, que tiene 98 temas evaluables, lo que resulta un temario «extensísimo», según admitió.

«Acuerdo razonable»

Por ello, se mostró seguro de que los profesores que integran el equipo técnico de esta asignatura «llegarán a algún tipo de acuerdo razonable» y lo harán «cuanto antes» para que a los alumnos de Castilla y León no se les exija «ni más ni menos» que a los del resto de España. Rey indicó, además, que Castilla y León cumple con las normas fijadas para el examen de la EBAU y que no sabe si otras comunidades autónomas lo hacen . Pese a ello, defendió esta prueba, que el Ministerio de Educación implantó el año pasado «con buen criterio», ya que estableció unos contenidos exigibles comunes en todo el territorio nacional con el fin de homogeneizar contenidos después de que se suspendiera la obligatoriedad de realizar un examen final para pasar el Bachillerato.

Esos contenidos comunes de la EBAU, opinó el consejero de Educación, los estableció el Ministerio porque era «consciente de que hay muchas diferencias de nivel » entre las distintas comunidades. Subrayó también el nivel de la región como los más altos de España en materia educativa , según avalan las distintas evaluaciones realizadas tanto en Primaria como en Secundaria.

Igualmente, alabó, en presencia del secretario de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades del Ministerio de Educación, Marcial Marín , el papel «activo» que el Gobierno de la nación ha tomado a la hora de lograr un pacto de Estado por la Educación.

Pacto educativo

Sobre ese acuerdo, Marín indicó que pretende que sea aprobado antes del verano con apoyo de partidos políticos y Ejecutivos autonómicos, para lo que pidió «altura de miras» y dejar aparcados los asuntos sobre los que hay discrepancias. Como primer pilar del Pacto Social y Político por la Educación mencionó la apuesta por la mejora del profesorado mediante la fijación de «un MIR educativo», mediante el cual los profesores deban pasar una formación inicial y tengan también formación permanente.

Otra de las bases del acuerdo es la apuesta por la Formación Profesional, Dual y adaptada a la demanda de las empresas de la zona. Marcial Marín señaló que la FP supone una gran oportunidad laboral y recordó el cambio de tendencia experimentado que ha hecho que el número de alumnos de la FP se haya incrementado en casi 200.000 en seis años y este curso sean ya más de 810.000 los estudiantes.

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