FUENTE: Ministerio del Interior
FUENTE: Ministerio del Interior - ABC

Solo el 3,44 por ciento de las 121.118 denuncias por desaparición presentadas en España siguen activas

De las 4.164 denuncias activas, el 74% son de hombres, la mayoría de entre 36 a 50 años

MADRID Actualizado: Guardar
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Las Fuerzas de Seguridad del Estado, incluidas las policías autonómicas, tenían contabilizadas a fecha de 4 de nero de este año 259 desapariciones calificadas de alto riesgo, sea éste confirmado o no. Se trata del 5,13 por ciento del total de las denuncias que seguían activas en ese momento, y la mayoría de ellas, un 74 por cient, son de hombres. Por tramo de edad, el más frecuente, -un 28,97 por ciento de ese grupo- corresponde a ciudadanos de entre 36 y 50 años de edad.

Estas son las principales cifras del primer informe de personas desaparecidas en España que ayer presentó el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, con motivo de la celebración, mañana, del día nacional sobre esta materia.

Además, Zoido dio algunos detalles de las funciones del nuevo Centro Nacional de Desaparecidos, que estará en funcionamiento en los próximos meses.

En nuestro país, siguiendo la recomendación del Consejo de Europa, la persona desaparecida es aquella «ausente de su residencia habitual sin motivo conocido o aparente, cuya existencia es motivo de inquietud o bien que su nueva residencia se ignora, dando lugar a la búsqueda en interés de su propia seguridad y sobre la base de interés familiar o social».

Andalucía y Cataluña

El sistema de Personas Desaparecidas y Restos Humanos tiene registradas un total de 121.118 denuncias, de las que solo 4.164 seguían activas, lo que supone un 3,44 por ciento del total. De estas últimas 547 son anteriores a 2010, año en el que entró en funcionamiento el sistema antes citado. Por tanto hay 116.954 denuncias que quedaron sin efecto al ser localizadas las personas buscadas.

Por lo que se refiere a las denuncias activas de alto riesgo, la distribución territorial de las mismas indican que Andalucía, Cataluña, Canarias y Galicia son las comunidades que tienen una incidencia más alta, con más de quince casos cada una de ellas. Si hablamos de provincias, las que están a la cabeza, con más de seis desapariciones de este tipo, son Barcelona, Las Palmas y Málaga.

También es interesante analizar la distribución por sexo del total de denuncias presentadas. En este apartado son los varones lo que se llevan la palma, con un 56,06 de los casos, mientras que hay otro 0,66 en los que no consta si los desaparecidos son hombres o mujeres. En los que siguen activos y además están calificados de alto riesgo, ese porcentaje es del 3,31 por ciento en los varones, que baja a un 1,44 por ciento en las mujeres.

Por lo que respecta a la edad, hay una mayor incidencia en las denuncias de alto riesgo de personas entre los 36 y los 50 años (un 28,97 por ciento), seguido de los mayores de 65, con un 27,1 por ciento. Donde hay menos casos es entre los 18 y 25 años.

Alarma social

Evidentemente las desapariciones de menores son las que más alarma social provocan y de hecho siempre son calificadas de alto riesgo salvo en casos excepcionales en los que es evidente la voluntariedad de la desaparición, como las fugas que se producen en los centros de internamiento.

Dos terceras partes de las denuncias registradas corresponden a menores de 18 años, aunque la mayoría de denuncias activas no se producen sobre personas de este tramo de edad. El dato más elevante, no obstante, son las de alto riesgo, que suponen solo el 9,35 por ciento del total. Además, la gran mayoría de los casos activos son de ciudadanos extranjeros.

En lo que se refiere a la distribución territorial de las denuncias activas sobre menores son las comunidades de Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña, Murcia y Canarias las que mayor número de casos presentan, mientras que por provincias son, por este orden, las de Cádiz, Almería, Granada, Murcia y Málaga.

Los autores del informe advierten de que es necesario «mejorar la recopilación y grabación de los datos y la explotación estadística de los mismos», y reconocen «limitaciones que deben corregirse en el futuro».

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