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El fiscal jefe Anticorrupción, Manuel Moix, en una imagen reciente - EFE
Congreso de los Diputados

Toda la oposición pide el cese de Moix y ven cercana su renuncia

Ábalos subraya que Anticorrupción debe estar en manos de alguien «ejemplar» y no de quien usa las mismas herramientas que los corruptos

Madrid Actualizado: Guardar
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Los grupos de la oposición están convencidos de que la posesión del 25 por ciento de una sociedad radicada en Panamá va a obligar al fiscal jefe de Anticorrupción, Manuel Moix, a dimitir. Desde Ciudadanos al PSOE pasando por Podemos coinciden en que este hecho da la puntilla a un cargo que ya ha sido reprobado por el Congreso por su actuación en el caso Lezo.

A puerta cerrada no lo ven mejor los populares, aunque públicamente mantienen su apoyo a Moix. Reconocen en privado que Moix «lo tiene muy difícil» ante el paralelismo que se establece entre su situación y la del exministro de Industria, José Manuel Soria, que acabó dimitiendo por participar también una empresa radicada en Panamá.

En el caso de Moix, al ocupar el máximo cargo de Anticorrupción, los populares reconocen que cualquier sombra de duda sobre su actuación «es letal».

Así, y aunque en el interior de Hemiciclo se debate la aprobación de las últimas secciones de los nuevos Presupuestos, el proyecto parlamentario más importante del año, las declaraciones y comentarios sobre el futuro de Moix vuelven a centrar esta mañana los corrillos en los pasillos del Congreso.

Desde el PSOE, su nuevo portavoz parlamentario, José Luis Ábalos ha advertido que «no puede seguir ni un minuto más en su puesto», reclamando una vez más al fiscal al general del Estado, José Manuel Maza, que lo destituya «de modo inmediato».

Sostiene el socialista que para encabezar la lucha contra la corrupción no es suficiente actuar tan solo legalmente sino que debe hacerlo ejemplarmente y no hacer uso de los mismos mecanismos que utilizan los corruptos. A sus ojos, ese 25 por ciento de una sociedad panameña le «inhabilita» para el cargo.«La actitud ejemplarizante cuando se imparte justicia tiene que ser clarísima», ha remachado.

Desde Podemos, el secretario de Análisis Estratégico de Podemos, Íñigo Errejón, ha aseverado que «cada día recibimos una prueba más de que (Moix) no es el más idóneo para estar en esa posición, y si tuviera un poco de decencia tendría que irse». Por su parte, el líder de la formación Pablo Iglesias ha asegurado a la salida del Pleno que «es vergonzoso lo que llevamos conociendo semanas y meses sobre el señor Moix». Iglesias está utilizando este caso para justificar su estrategia de la moción de censura: «Esto no se arregla con la destitución del señor Moix. Hay que conseguir echar al PP de las instituciones».

También en los pasillos del Congreso, el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha apoyado la exigencia de explicaciones en sede parlamentaria para poder valorar «no sólo la legalidad, sino también la ética y la estética de la situación». En Ciudadanos se extiende el convencimiento de que a Moix le quedan horas.

El líder de la formación centrista, Alber Rivera, ha sido muy contundente al respecto durante una intervención en Cuatro: «Espero que cesen al señor Moix cuanto antes y que se ponga a un fiscal anticorrupción que no esté bajo sospecha». Ciudadanos ya solicitaba su cese, pero el caso de su empresa en Panamá les ha ratificado en su postura: «Ningún cargo público puede tener nada en paraísos fiscales».

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