Joan Baldoví: el «alter ego» de Mónica Oltra en el Congreso

El diputado ejerce desde 2011 como avanzadilla de Compromís en Madrid

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Joan Baldoví (Sueca, Valencia, 1958) ejerce desde hace cinco años de avanzadilla de Compromís en Madrid. Este maestro de escuela fue el primer diputado nacional de la coalición nacionalista. Es la extensión de Mónica Oltra en el Congreso. Alcalde de su localidad natal entre 2007 y 2011, no admitía protestas en los plenos y no le temblaba el pulso para expulsar a quien fuera necesario.

Sin embargo, en su etapa de diputado se ha labrado la fama de político afable. De alcalde de perfil bajo (gobernó su pueblo gracias a un pacto los socialistas) ha pasado a acaparar los focos de la política nacional. El pasado martes, Baldoví, uno de los dirigentes mejor valorados de España, de acuerdo con el Centro de Investigaciones Sociológicas, captó toda la atención mediática durante la audiencia con Su Majestad el Rey.

El de Sueca, Baldo para los amigos, volvía a ejercer de avanzadilla y llevaba bajo el brazo el encargo de Oltra. Un documento titulado «Acuerdo del Prado» (un corta y pega resumido del texto con el que Compromís, Podemos y PSPV sellaron el pacto en la Generalitat valenciana) para conseguir lo que nadie había logrado desde el 20 de diciembre: un acuerdo para gobernar España. La gloria fue efímera.

Con su salto a la política nacional ya había trasladado al Congreso la política de la «camiseta» que había popularizado su mentora Mónica Oltra. Sus enfrentamientos con Mariano Rajoy se hicieron virales. Un solo diputado hacía más ruido que un grupo parlamentario entero. Un vahído suyo abrió telediarios.

Baldoví, como buen maestro de educación física, lo mismo llega en bicicleta a recoger su credencial que se hace acompañar de una charanga para tomar posesión del acta. Las fotos y los vídeos están garantizados. Esa es la esencia de Compromís. Política en estado puro. La gestión pasa un segundo plano. De hecho, Baldoví dejó como legado el Ayuntamiento con las cuentas más opacas de la Comunidad Valenciana, conforme denunció la Sindicatura de Cuentas.

En su etapa de alcalde también tuvo tiempo de presidir la Red de Ciudades Valencianas integradas en la Fundación Ramón Llull, cuyo objetivo era difundir internacionalmente la lengua y la cultura catalana. Allí coincidió con Ximo Puig, entonces regidor en Morella.

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