La Ejecutiva de Ciudadanos aprueba abstenerse en la investidura de Rajoy

La dirección de Ciudadanos ha aprobado este miércoles que los 32 diputados de la formación se abstengan en la segunda votación de investidura de Mariano Rajoy. Albert Rivera enmienda así su rechazo a Mariano Rajoy para contribuir a que arranque la legislatura. Aunque el líder naranja y su Ejecutiva han elegido la fórmula que menos le vincula al Gobierno. En primera votación, la formación naranja votará «no» al PP.

Como reconoció ayer Rivera, su plan de que Mariano Rajoy se apartase y formar un Gobierno de coalición con el PSOE y un nuevo líder del PP era «una vía muerta». Por lo que asume el Ejecutivo en minoría de Rajoy pero no a cambio de medidas concretas sino pensando en que arranque ya la legislatura para tratar de sacar adelante sus reformas en un escenario de geometría variable.

Acompañado por los miembros de su Ejecutiva, Rivera ha escenificado hoy la unidad de acción. Y ha recordado hasta en tres ocasiones que la decisión se ha tomado «por unanimidad».

Fuentes de la dirección del partido explican que se ha elegido esta alternativa porque en la primera votación se necesita mayoría absoluta y ni siquiera la abstención del PSOE facilitaría la investidura. Creen que además eso dará a Rivera la posibilidad de hacer un discurso en la sesión de investidura más contundente y marcar distancias con Rajoy.

Cuestionado por el motivo que le llevó a votar sí a Sánchez mientras que con Rajoy el límite lo establece en la abstención, Rivera ha recordado que por entonces se trataba de un acuerdo de Gobierno, que además implicaba renovación: «Estábamos ante un Gobierno nuevo y este es continuista».

Ayer ya dejó claro Rivera, y hoy ha insistido en ello, que la abstención no es a cambio de un programa de medidas concreto: «No tomamos esta decisión para sacar compromisos que no suman 176. No es una abstención para apoyar a Rajoy. Es para que no haya elecciones», ha explicado.

En los parlamentos autonómicos en los que fue determinante, Ciudadanos sí apostó por condicionar su apoyo en la investidura a cambio de una serie de reformas. Rivera ha justificado que no sea así porque «ellos eran decisivos» mientras que PP y Ciudadanos «ahora no sumamos». «No hay suma aritmética que pueda garantizar esas medidas y no tenía sentido».

Rivera, que ha anunciado que llamará tanto a Sánchez como a Rajoy para transmitirles su postura y ha asegurado que ahora «le toca mover ficha al PSOE», recordando que «solo con una abstención en segunda votación» de los socialistas arrancaría la legislatura.

El líder de Ciudadanos ha pedido «una reflexión a los demás partidos de la oposición» para que no se repitan las elecciones igual que «el PP tiene que asumir» que tendrá que gobernar de otra manera. Y ha dejado claro que, en última instancia, la medida que ha adoptado hoy la dirección es una forma de presión al PSOE: «Es algo que puede colaborar para que otros partidos de la oposición lo vean con normalidad».