MUTUA MADRID OPEN

Nadal: «No entiendo los Juegos sin estar en la Villa»

El español, que ya prepara el Mutua Madrid Open con energía renovada, deja claro que en Río se alojará con el resto de atletas

Madrid Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Con la agenda repleta, Rafael Nadal se enciende para el Mutua Madrid Open, que este año celebra su decimoquinta edición. El jueves por la tarde aterrizó en la capital el tenista balear y ya el viernes cumple con el protocolo, la misma rutina de cada año. Antes de entrenarse (a partir de las 13 horas, tiene dos horas de pista reservada) atiende a los medios en un acto de Kia y habla con la satisfacción de los éxitos recientes. Son dos títulos de peso, Montecarlo y Barcelona, y la designación como abanderado español para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

«Me siento bien, creo que llevo todo el año bien. Me siento con ilusión,. Y ahora viene Madrid, que es en casa y siempre lo hace diferente.

Son dos semanas emocionantes por por jugar en casa y uno quiere estar muy preparado. He llegado con tiempo, hoy empiezo los entrenamientos y quiero llegar bien al estreno, que será el miércoles», desvela.

Nadal exhibe la paz que da la victoria, tan difícil en la élite. Es el primero que sabe del valor de los resultados, que dependen de centímetros en su deporte. Pero ahora admite que se ha liberado porque el palmarés va a más, dominador en este inicio por la gira europea de tierra. «Desde Montreal estoy mucho mejor. Me sentía bien en US Open, en Cincinnati... Perdí demasiados partidos que podía haber ganado el año pasado. En Pekín hice final, en Shanghái semifinales, en Basilea final, en París cuartos de final y en el Masters, semifinales. Hice una gran pretemporada, me sentía muy bien», relata.

Entonces llegó el chasco de Melbourne y volvieron los nubarrones, ya dispersos en el cielo azul que ha dibujado estas semanas de mordiscos. «Australia fue un golpe duro, me sentía preparado. Y a Buenos Aires y a Río de Janeiro no llegué bien preparado. En Buenos Aires tuve pelota de partido contra Thiem, uno de los mejores de tierra. Pero en deportes cambia todo en un abrir y cerrar de ojos. En Indian Wells jugué bien, en Miami tuve el accidente de deshidratarme y en Montecarlo y Barcelona lo he hecho bien. Pero el cambio vital es el resultado. El nivel es alto y ojalá pueda darle continuidad aquí».

Apunta a ello, o al menos se ha ganado con creces el aparecer en todas las listas de candidatos. Obviamente, sigue lejísimos de Novak Djokovic, pero Nadal es el primero de los otros, al menos por sensaciones. Además, ya no tiene piedras que arrastrar. «Es más divertido aprender ganando que perdiendo. Aprendes en el día a día. Son experiencias que vives en tu carrera y tratas de coger las cosas que te sirven. Yo lo único que he hecho estos meses es trabajar. Era un punto complicado a nivel mental, de nervios, de ansiedad. Me costaba medir los tiempos de la pelota y del partido y desde el trabajo y la ilusión me siento bien, mucho mejor, disfruto de jugar».

Y también de representar a España, el mejor embajador para la cita olímpica de Río. «Estoy muy agradecido al COE por pensar en mí para llevar la bandera en los Juegos. Es un gran honor y una gran satisfacción. Estar en los Juegos ya es algo muy especial, estaba con mucha ilusión de vivir la experiencia única que son unas Olimpiadas. Y llevar la bandera es una ilusión muy grande, voy a intentar representar bien a España y ojalá y lleguemos todos sanos, bien preparados para lograr los mejores resultados posibles».

No oculta que le genera un cosquilleo especial y más después de la decepción de 2012, en donde iba a llevar la bandera pero se tuvo que ausentar de la cita de Londres por lesión. «Sabía que estaba dentro de los candidatos y tenía que esperar a la votación. Y el miércoles me llegó la llamada de Alejandro Blanco y la recibí con muchísima ilusión. Son muchos años por el mundo y poder ser abanderado representando a tu país es algo muy especial. Tengo mucha ilusión, como en 2012, pero entonces no pudo ser».

Nadal, un tenista de leyenda que disfruta de todas las comodidades del tenis, se emociona cuando habla de los Juegos, conquistados en 2008 cuando aún vestía sin mangas. «El formato es diferente, no se puede comparar. No la hay. Es un mundo diferente, una filosofía diferente, convives con todos los deportistas. Estamos muy bien colocados a nivel de privilegios e infraestructuras en el tenis y en los Juegos competimos en el evento más importante del mundo del deporte. Y lo hacemos con deportistas que no tienen la suerte que tenemos algunos. Es especial, estamos todos juntos. Es el deporte real, no el que la gente ve por la tele. Son los verdaderos valores del deporte y te das cuenta de la realidad. Es algo único e inolvidable».

Todas las miradas se centrarán en su figura y explica su sensación. «No es comparable con un título. Lo considero un reconocimiento. Y los reconocimientos a cosas bien hechas son una gran satisfacción. Espero que sea a mi carrera y a un comportamiento adecuado. Me llena de satisfacción que sea así», zanja. Además, quiso dejar claro que él jamás ha dicho que se alojará en casa de un amigo como se ha publicado. «No entiendo unos Juegos si no estoy en la Villa Olímpica. Es una invención total, nunca de mi boca habrá salido eso».

Entre otros asuntos, se habló de la querella que ha interpuesto en contra de Roselyne Bachelot, exministra de Sanidad y Deportes que le acusó de haber dado positivo. «Estamos en un proceso legal. Ya dije que no haría más declaraciones, hablé cuando tenía que hablar y dije lo que íbamos a hacer. Se ha hecho cuando lo teníamos todo bien preparado para presentar la denuncia. Una vez se ha hecho, estamos en manos de la ley y de los jueces. Tengo plena confianza en la justicia y se tenía que hacer porque llega un momento en el que hay que decir basta. Son cosas muy serias».

Ver los comentarios