Rajoy proclama «un cambio de ciclo» en el mercado laboral tras frenar «la sangría del paro»

«El mercado laboral ha dado un giro de 180 grados y ha cambiado de ciclo». Con estas palabras Mariano Rajoy anunció ayer que España ha creado empleo neto por primera vez desde la crisis. «Llevo muchísimo tiempo, desde que llegué a ser presidente del Gobierno, deseando dar una noticia como la que doy ahora», reconoció el jefe del Ejecutivo sin ocultar un ápice su alegría por las buenas cifras reflejadas en la EPA del segundo trimestre del año. Unos datos que, en su opinión, suponen un punto de inflexión para el país. «El paro ha pasado de crecer un 12,5% anual cuando llegamos al Gobierno a reducirse un 7% en este segundo trimestre. Hemos conseguido frenar esta sangría», sentenció durante su intervención en el II Foro Internacional de Políticas Públicas de Empleo celebrado en la Casa América y en el que Rajoy pudo presumir de recuperación económica ante las delegaciones de hasta 40 países invitados.

«Hoy podemos decir que la relación entre actividad económica y empleo es la mejor de la historia. Nunca se había creado empleo con tasas tan bajas de crecimiento económico», señaló Rajoy en la línea de lo expresado en numerosas ocasiones por el ministro Cristóbal Montoro. El presidente dejó claro que esa nueva capacidad de la economía se debe a las reformas estructurales. Así, recordó que España sufrió los estragos de la crisis debido a un marco laboral «inadecuado y muy rígido» que solo protegía a una parte de los trabajadores y cuyos ajustes se limitaban al despido. Para corregir esta disfunción, Rajoy defendió la reforma laboral emprendida por su Ejecutivo con el objetivo de «flexibilizar» las condiciones laborales, «modernizar» la negociación colectiva e impulsar las pymes y el emprendimiento. Dos años después de aprobarse dicha reforma, Rajoy presumió de resultados: «Hoy hay 263.000 parados menos que cuando el Gobierno aprobó la reforma laboral».

Los buenos datos de la EPA permitieron al presidente hacer un discurso bastante triunfalista en el que recordó que hay 100.000 jóvenes parados menos que hace un año o que la subida de la contratación indefinida en 180.000 personas es la mayor desde el año 2007. Un dato con el que el Gobierno trata de refutar la idea de que el empleo creado mayoritariamente es a tiempo parcial. Además, quiso subrayar que la mejora del empleo no es «coyuntural», sino «estructural».

Sin embargo, el presidente insistió en que la tasa de paro todavía es alta y que su Gobierno seguirá tomando medidas para que el paro «pase a ser una triste historia de España». En este sentido, Rajoy advirtió de que seguirá impulsando nuevas reformas en la inserción laboral de los servicios públicos.

«Conciencia tranquila»

Por último, Rajoy lanzó un mensaje para quienes le han criticado durante todos estos años: «Lo cómodo cuando se está en el Gobierno es no hacer nada. O intentar dar solo buenas noticias. Pero eso es pan para hoy y hambre para mañana». Y justificó la necesidad de hacer reformas, a pesar de que en el corto plazo «todo son criticas». Pero reiteró que es necesario tomar decisiones para el interés general aunque sean «duras y de difícil comprensión». «Siempre queda la tranquilidad de conciencia y saber que uno a hecho lo que tenía que hacer», sentenció.

En el acto de inauguración de las jornadas también participó el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Guy Ryder, quien aprovechó su intervención para felicitar al Gobierno por los últimos datos de empleo. Sin embargo, el dirigente de la OIT advirtió de los peligros del empleo irregular que lleva aparejado un «déficit de cobertura de protección social». «Y esto supone condiciones de trabajo pésimas», recordó.