«Su formación y su sentido de Estado son una garantía»

La normalidad con la que se está desarrollando el proceso de abdicación y la proclamación ya es de por sí un motivo de satisfacción para el presidente de la Diputación. Aún no sabe si los compromisos le permitirán sacar tiempo para ver algún detalle del acto, pero lo asume «con expectación porque es un día histórico para España». Este cambio en la institución «supondrá un impulso para la democracia, que alcanzó las mayores cotas de estabilidad y prosperidad durante el reinado de Don Juan Carlos». Asegura que en aquella proclamación de 1975, con apenas 17 años, ya tenía todas sus esperanzas puestas en el joven monarca que hoy cede el cetro a su hijo. Loaiza está convencido de que Felipe VI es «justo heredero de los valores que han convertido a España en una gran nación». «Su formación, su sentido de Estado y su experiencia son una garantía para afrontar los difíciles retos».