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El diluvio

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Si fundara un partido político su nombre sería JODEMOS: no podrían acusarme de engañar al votante/consumidor o de no respetar la marca nacional y su objeto social. Comenzaría el programa electoral con la poesía social de los Smashing Pumpkins: «The world is a vampire» (a spanish vampire, añadiría yo). La poesía social es ese bólido que dejó atrás a Silvio, Aute y Ruibal para diluirse entre redes sociales; ésas en las que cualquiera es Rey. Aforismos, citas y tuits pasan a la eternidad para autodesterrarse al olvido del ya no es noticia, segundos después. Que sí, reconozco que algunos son graciosos pero recapacitando vemos que los jodientes no nos conformamos fácilmente .

Un chaval desgarbado y coletudo con voz de locutor y lección memorizada, más listo que el hambre, ha dado una señora patada en los cojones al bipartidismo, y encima partiendo de unas primarias. La derecha, que siempre peca de torpe, se le abalanzó encima excretando bilis. Pablo Iglesias II, el politólogo, tiene un kung-fu superior: defendiendo un programa demasiado ex libris del Partido Comunista ha logrado cinco eurodiputados. Elena Valenciano compareció con cara de suegra divorciada reconociendo el fracaso del socialismo; a Cañete ni le dejó hablar Cospedal; Cayo Lara puso cara de Cayo Lara y Rosa Díez riñó un poco. Después, lamieron el aire los cuchillos en Ferraz: Felipe González, descompuesto. Rubalcaba, sí pero no; Susana, no pero sí; Madina clamando al desierto y Carme orinando en la vieja mesa-camilla con su incendiaria cartita. Jodidos, todos.

Para colmo , el lunes anunció Rajoy que el Rey abdicaba. Los futuros votantes de JODEMOS enloquecieron. Unos protestaron porque la cobertura de la noticia les impedía ver MHYV y otros colgaron fotos de Letizias, elefantes y caídas por doquier. Las banderas republicanas salieron a reflectar luz y todo el mundo dio su opinión ocasionando grandes RFF (Reyertas Familiares en Facebook) discutiendo si los del Madrid son monárquicos y de derecha y los del Barça son republicanos y de izquierda. Nos gusta polemizar en vano habiendo una solución fácil: que las próximas elecciones las ganen los partidos republicanos. Tras eso, que convoquen referéndum. Y entonces votamos. No le veo tanto problema. O quizás sea que, hay menos republicanos que monárquicos en la España del JO-DE-MOS. Y eso jode.