Tapar el agujero de la precariedad laboral con una tirita

La precariedad laboral que arrastra la sanidad pública no fue una consecuencia de la crisis. Mucho antes, hospitales y centros de salud fueron ampliando sus carteras de servicio a mayor velocidad de lo que crecían las plantillas. Los recortes sólo han venido a acentuar una situación que empieza a tener una consecuencia directa en la calidad del servicio. Hoy los profesionales continúan encadenando contratos eventuales sin que ninguna oferta pública de empleo logre equilibrar la balanza. La última, que presentó la consejera de Salud e Igualdad, María José Sánchez Rubio, el pasado miércoles es apenas una tirita con la que tapar la enorme pérdida de profesionales que en el caso de Cádiz supera el millar en los últimos dos años. Este nuevo concurso de oposición prevé cubrir 1.407 plazas en toda Andalucía y el compromiso de ampliar el contrato a los eventuales.

El sindicato de enfermería Satse llegó a cuantificar esa relación directa entre la reducción de la plantilla y el impacto sobre el servicio. Los 1.100 puestos de trabajo que no se han cubierto desde 2012 tiene mucho que ver en el aumento de las 1.200 personas de la lista de espera quirúrgica. La organización realizaba este estudio con los datos oficiales que ofrecía el Ministerio de Hacienda con el censo del personal al servicio de las administraciones públicas y los tiempos de respuesta asistencial que publica el SAS -aunque cada vez con menos asiduidad-.

«Es lógico que tanto el servicio como la labor de los profesionales se vean afectados», señala Pedro Calderón, presidente provincial del Sindicato Médico. A su juicio, esta nueva oferta de empleo «cubrirá una mínima parte de los puestos que se han perdido». En lo que toca a la categoría de especialistas destaca que «hay servicios hospitalarios en los que más de la mitad son eventuales contratados al 75%». Calderón explica que «eso significa que esos médicos trabajan cuatro días a la semana y con ellos se cubren jubilaciones y bajas».

Más demora

Y en lo que toca al servicio, se traduce en un aumento de la lista de espera quirúrgica, de la demora para pruebas diagnósticas e incluso de la cita previa en centros de atención primaria y el aumento de cupos para los facultativos, obligados a ver a más pacientes en el mismo tiempo.

Tampoco resulta suficiente la oferta anunciada por la Consejería para Comisiones Obreras. Su secretario provincial de Sanidad, José Antonio Aparicio, reconoce que el margen de la Junta está limitado por la imposición del Gobierno central de aplicar una tasa de reposición del 10%; sin embargo, reprocha que la contratación temporal no se haga a jornada completa. En este caso, destaca la «enorme tasa de eventuales de Cádiz, que está muy por encima de otras provincias».

Los hospitales son los que más sufren esa carencia de personal, considera el portavoz sindical, que destaca la especial incidencia en categorías como la de auxiliares administrativos, de enfermería y celadores. Aparicio valora el compromiso de ampliar el tiempo de contrato a los eventuales, pero también exige que se haga por jornadas completas para reducir el déficit de profesionales.