«Estamos cansados de ser los marginados, de oler a podrido y no tener siquiera luz»

A un lado de la carretera se puede ver un jardín bien cuidado, sin apenas basura y limpio. Al otro un solar de matojos y palmeras muertas, lleno de escombros con farolas rotas, hierbas por las aceras y sucio. Sólo unos metros separa ambas estampas y los que padecen la peor parte están hartos de esta situación. Por eso ayer denunciaron públicamente el estado de su barriada, situada en Gallineras, justo en frente del canal del tormentas, al sentirse «cansados de ser los marginados, de oler a podrido y no tener siquiera luz». Es el testimonio de Petro Rodríguez, una de las residentes de la zona. Todo lo que dice cuenta con el apoyo del resto de vecinos.

Uno de los principales problemas que padecen está provocado por los antiguos pisos de Aifos. La promoción de viviendas de 'Cala del Sol' tiene conectada sus aguas fecales a este canal de tormentas. El pasado verano ya expusieron al Ayuntamiento sus quejas y se detectó la causa. Al parecer las aguas fecales provenían del pozo de uno de los bloques, motivo por el que fue sellado. Pero, ha vuelto a aparecer. Cada cierto tiempo el canal de tormentas se llena de mierda y desperdicios que provienen de los pisos que tienen a escasos metros «y el olor es insoportable», por lo que deben a acudir para su limpieza.

Han vuelto a denunciar esta situación y según han podido saber «es que por lo visto no es un único pozo el que estaba conectado sino que los demás bloques también tienen conectado sus pozos a las pluviales que dan salida al canal de tormentas, que se convierte en una cañería de mierda en vez de una salida de agua de lluvia».

No es el único contratiempo que proviene de este bloque. Para hacer la obra se les cortó la luz de las farolas. Han pasado años y resulta que no se ha vuelto a poner. Es decir «que llevamos años sin tener luz en las cuatro farolas que tenemos. Nos dijeron que tras la feria del año pasado se volvería a contar con el alumbrado, pero pasa el tiempo y siguen sin hacernos caso».

Ellos mismos han tenido que colocar rejillas en las alcantarillas para evitar que se cuelen roedores en sus viviendas. También temen por las palmeras que están muertas en el lugar y que con el temporal han amenazado con caerse, «incluso hay restos de parte de una que cayó recientemente».

El solar que tienen en frente, parte privado y parte municipal, acumula escombros y basura, sin que nadie se haga cargo de su limpieza. Otro tema que denuncian, la falta de atención por parte de barrenderos. Exponen los vecinos de esta barriada que por allí no pasa nunca nadie del servicio de limpieza para atender a su calle y que son ellos mismos los que la baldean. Incluso vacían las papeleras que están colocadas en el lugar.

«No nos tienen en cuenta. Mira ese bloque de hormigón. Eso lo pusieron cuando las obras para hacer este paseo. Hace años que se ha finalizado los trabajos y todavía no se han dignado ni a quitarlo». Piden una mejor señalización y que se les tengan más en cuenta. «Los contenedores están estropeados, no limpian, nos invaden las ratas y las fecales. Estamos cansados de mandar cartas y escritos pero solo sirve para que las amontonemos porque la situación continúa igual o peor».