Un estudiante ruso mata a un profesor y a un policía tras tomar como rehenes a 24 compañeros

A diferencia de Estados Unidos, en Rusia no suelen ser frecuentes los tiroteos en centros docentes ni tampoco las tomas de rehenes. Sin embargo, ayer sucedió precisamente eso en la escuela número 263, en el barrio moscovita de Otradnoe. Serguéi Gordéyev, uno de sus alumnos, se presentó al mediodía en el colegio armado con un fusil de pequeño calibre y una escopeta de caza.

El encargado de seguridad intentó sin éxito impedirle el paso, aunque pudo activar la alarma. Salió detrás del chico, que se dirigió al aula de Biología. Por el camino, Gordéyev disparó e hirió de muerte a un profesor de Geografía. Ya en la clase, tomó como rehenes a 24 compañeros de su curso. Poco después, llegó la Policía y el adolescente empezó a disparar desde la ventana. Mató a uno de los agentes e hirió de gravedad a otro.

El Ministerio del Interior creó una célula de crisis, acordonó y evacuó la escuela. Hasta el ministro de Interior, Vladímir Kolokóltsev, y el jefe del Comité de Instrucción, Alexánder Bastrikin, se personaron en el lugar. La Policía decidió involucrar al padre del escolar, un antiguo agente de los servicios secretos, en las negociaciones. Finalmente lo logró y el joven, de 15 o 16 años, fue detenido. Los motivos que llevaron a Gordéyev a actuar así se desconocen, aunque se especula con alguna disputa con los profesores.