Maduro promueve un orden económico «de excepción»

Con la misión de garantizar «la suprema felicidad social», el Gobierno de Nicolás Maduro ha lanzado «una etapa especial de ofensiva económica» que permitirá un «nuevo orden interno de transición al socialismo». Las medidas para esta «economía de excepción» contemplan una campaña contra el acaparamiento y la especulación, un control cívico-militar de precios de todos los productos, el ahorro nacional en bolívares, mayor regulación en la compra de divisas y aumentar la productividad para lograr el abastecimiento de alimentos y de bienes fundamentales en Venezuela.

La escenografía para explicar tan delicado mensaje fue bien estudiada. El presidente chavista apareció de traje y corbata, acompañado de todo su Ejecutivo, de gobernadores, y con tres grandes retratos del Libertador Simón Bolívar a su espalda. Nada más iniciar su alocución, el mandatario dejó claro que uno de los pilares contra la crisis es la operación lanzada contra la especulación y el acaparamiento. «Preparen sus papeles. Somos miles los que iremos a ver los almacenes para ver por qué tienen acaparado y aguantado los productos y para ver los precios», alertó Maduro, que confía en que la Asamblea Nacional apruebe la Ley Habilitante que le dará poderes especiales la próxima semana.

Otra medida promovida por las autoridades de Caracas es la regulación del coste de los productos. El objetivo será «el establecimiento, estabilización y respeto del sistema de fijación de precios justos y máximos de todos los productos con todos los establecimientos», precisó el gobernante. En definitiva, se tratará de ejercer un mayor control sobre una economía cuya inflación rondó el 40% en el periodo de enero a septiembre. «Al pueblo le roban en la calle», denunció Maduro, en alusión a que «la burguesía parasitaria», es decir, los especuladores multiplican hasta por 30 el coste de los bienes de consumo.

En su intervención, puntero en mano, mostró cartulinas con gráficos y primeras planas de periódicos titulando sobre la escasez: «La campaña que han hecho con el papel higiénico es perversa», comentó. Hace meses se ilustra la carencia de alimentos en los supermercados con imágenes de baldas vacías. Para el Gobierno son los grandes productores y las cadenas de supermercados los que atiborran sus almacenes para crear descontento. En ese marco, acusó a los organismos Consecomercio y Fedecámaras de ser los «operadores» de la «guerra económica silenciosa» que busca «el derrumbe del Estado y el caos social».

Inversiones contra la crisis

A fin de evitar un mayor deterioro, el mandatario anticipó que su Ejecutivo hará grandes inversiones para garantizar el abastecimiento alimentario y de otros bienes de consumo hasta comienzos del próximo año. Prueba de ello son los 5.000 camiones de distinta capacidad que ha encargado a China y Brasil, además de la creación de la Corporación Nacional de Servicio, Logística y Transporte para dinamizar el comercio.

Respecto al cambio de monedas, el gobernante chavista enfatizó que el dólar paralelo «es un dólar ficticio» porque los que están disponibles en el Consejo de Administración de Divisas cubren entre el 95% y 97% de las necesidades nacionales. «Lo utilizan como marcador perturbador económico psicológico, creado por factores desde Miami», añadió con rotundidad.

Luis Vicente León, respetado director de la encuestadora Datanálisis, consideró, sin embargo, que las medidas «no resuelven ni la escasez ni la inflación; que son más políticas que económicas y que están encaminadas a sustituir al sector privado como importador, y revisar, supervisar y castigar a quienes considera sus enemigos».