Los comités de Navantia exigen explicaciones por la renuncia del consejero delegado

Los comités de empresa de los astilleros de la Bahía pedirán explicaciones tanto al presidente de la compañía, José Manuel Revuelta, como al responsable de la SEPI, Ramón Aguirre, por la renuncia al cargo del consejero delegado, Jaime de Rábago, presentada el pasado viernes por la tarde. Las malas relaciones entre el presidente de Navantia y su brazo derecho eran un secreto a voces que quedaban patente en cada reunión del Comité Director. Revuelta y Rábago asumieron en abril de 2012 la dirección de esta empresa pública y los desencuentros entre ambos ejecutivos han sido constantes. Tardaron ocho meses en reestructurar la cúpula organizativa y han sido incapaces de captar nueva carga de trabajo, amen, de aplicar un plan de saneamiento que logre reducir los más de 300 millones de euros de déficit que acumula la compañía.

Los trabajadores temen que detrás de la renuncia del consejero delegado haya gato encerrado y sospechan, al mismo tiempo, que se produzcan a partir de ahora ajustes laborales.

Encuentro con Valderas

Por su parte, el vicepresidente de la Junta y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, mantuvo ayer en Sevilla una reunión con los representantes de los trabajadores de los tres astilleros de la Bahía. Valderas se ha comprometido a reclamar al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, una mayor carga de trabajo que suponga el mantenimiento del empleo en la Bahía de Cádiz. El vicepresidente mantiene mañana un encuentro con el titular de Hacienda.

Valderas explicó que en el encuentro con Montoro, además de abordar las medidas necesarias para hacer frente a la situación económica que atraviesan los ayuntamientos con mayores problemas financieros, también se analizará la situación del sector naval andaluz y la necesidad que tiene de carga de trabajo. «Al Gobierno andaluz le preocupa este sector y hace una apuesta seria y firme por defenderlo y mantener el empleo en los tres centros de trabajo que Navantia tiene en Cádiz», manifestó, quien pedirá a Montoro que el Gobierno central realice los impulsos presupuestarios necesarios para que esa carga de trabajo se siga manteniendo. En su opinión, el sector naval tiene «futuro, capacidad, alta calidad, competitividad y profesionales magníficos que pueden competir en el contexto internacional».