La teoría del autobús

Llevo mucho tiempo pensando en una teoría. Lejos de mirar los números del Instituto Nacional de Estadística, creo que la mejor manera de comprobar la edad media de una población es observando a los usuarios del autobús. Cuando pagas el billete de un 1,10 céntimos tienes ante ti una muestra aleatoria sobre la que elaborar diversas tesis. Casi siempre hay un niño acompañado de su madre que va o viene del médico, un extranjero con gafas de sol y piel rosácea, algún que otro joven con carpeta y sobre todo un buen número de personas mayores, algunas hasta con ganas de hablar.

En los últimos años, este último grupo de personas ha ido creciendo en gran proporción frente al resto de usuarios como ha ocurrido también en el resto de la ciudad. Tanto es así que a veces cuesta saber a quién se le cede el asiento, como reza la buena educación. Y es que en nuestra ciudad, la tradicional pirámide poblacional anda lamentablemente un poco descuadrada ante la obligada marcha de muchos gaditanos en busca de un futuro mejor. Hace poco conocíamos que los primeros españoles en cursar una Formación Profesional en Alemania gracias a un convenio entre el Gobierno germano y el español, eran nueve gaditanos. Allí compaginarán el aprendizaje del idioma alemán con un curso relacionado con los ámbitos de la mecánica y la fabricación de cañerías y raíles para después iniciar unas prácticas. Una oportunidad que consideran única dada las escasas posibilidades de prosperar en casa. Las más de mil solicitudes que han entregado en Escuela Oficial de Idiomas también ayudan a hacer una idea de las intenciones de muchos gaditanos. Los niveles de alemán han experimentado un incremento del 40% de la demanda en comparación al año anterior. Toda una declaración de intenciones. Llevamos años escuchando hablar de la falta de oportunidades de la ciudad, del obligado éxodo que emprenden los jóvenes en busca de un futuro mejor, una circunstancia que sin duda se ha agravado con la llegada de la crisis. Y mientras este éxodo se va renovando año tras año, aquí los políticos siguen hablando de planes de empleo locales, provinciales, autonómicos y estatales que no consiguen rebajar la alta tasa de desempleo a no ser que se alíen con el verano. De planes para emprendedores a pesar de que tenemos una de las cuotas más altas de autónomos y de créditos que se quedan en los bancos. Al final ni siquiera habrá dinero para coger el autobús, tendremos que ir andando.