La reestructuración del servicio de autobús urbano busca ganar más pasajeros

La eficiencia en el servicio de transporte público es una de las asignaturas pendientes que pesan sobre el Ayuntamiento. La reducción del contrato aprobada esta semana tiene por objetivo final que un mayor número de portuenses opten por tomar el autobús en sus desplazamientos por la ciudad. El ahorro para las arcas municipales será de unos doscientos mil euros anuales, pero al mismo tiempo habrá que pagar alrededor de noventa mil euros para compensar a la contrata, Daibus, por el recorte sobre el acuerdo inicial, que rondaba los 2,2 millones de euros. El Gobierno local confía en que este movimiento sirva para que el autobús deje de ser un lastre par alas cuentas y se convierta en una herramienta verdaderamente útil para los portuenses.

Los cambios que experimentará el servicio se harán de forma progresiva. Fundamentalmente se evitarán los recorridos por el interior de las barriadas, para agilizar los trayectos. Este ha sido uno de los puntos que más malestar ha suscitado, ya que lo que perjudica a algunos usuarios, que ahora tendrán que caminar varios metros hasta sus paradas, beneficiará a otros, que las tendrán más cerca. En cualquier caso, lo que se persigue es evitar los tortuosos recorridos por calles fundamentalmente residenciales que ralentizan mucho los viajes y desesperan a los pasajeros. Es el caso de las líneas 1 y 2 en la barriada de La Palma en Urbaluz y en el Pago La Alhaja. A este respecto, la línea 6, que cubre el trayecto desde este núcleo de viviendas a San Bartolomé, pasará a hacer lo propio desde Fuentebravía a la Plaza de Toros, que será la única con opción a transbordo.

Este ha sido otro de los asuntos por los que la oposición, concretamente Izquierda Unida, ha protestado. Y es que la posibilidad de comprar el bonobús con transbordo es una reivindicación que los izquierdistas llevan varios años haciendo al considerar que beneficiará al bolsillo y por ende, animará a tomar el bus. Ahora que se va a implantar, solo estará disponible para los usuarios de la línea de Costa Oeste.

La Línea 4 será la que más cambios experimentará, con la anulación de su paso por Cruces y plaza del Ave María, que será sustituido por la plaza de España y la calle Santa Lucía y la supresión de paradas en María Auxiliadora y Valdés. Por otro lado, habrá paradas nuevas, en la Ronda de Valencia, El Paseo y la avenida de La Libertad, entre otros.

En lo concerniente a los horarios, el ajuste del servicio también incluye su ampliación durante la temporada alta. Así, todas las líneas iniciarán sus recorridos entre veinte minutos y media hora antes, según el caso. Del mismo modo, el horario nocturno también se dilatará.