por petición vecinal

El alcalde confirma que firmará la suspensión del 'botellón' en El Puerto

Esta semana o la que viene prohibirá con un decreto que se practique esta actividad en toda la ciudad, hasta que no haya una alternativa a La Puntilla

EL PUERTO. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El 'botellón' en La Puntilla quedará suspendido. El alcalde, Enrique Moresco, ha confirmado que firmará el decreto que así lo ordene. De este modo responderá al órdago lanzado por la Mesa del Botellón, que la pasada semana votó de forma mayoritaria la anulación de esta actividad por la excesiva molestia que causa a los vecinos, fundamentalmente de San Marcos. Así, esta actividad quedará prohibido en toda la ciudad hasta que no se acuerde una ubicación alternativa.

Fuentes municipales señalaron que el primer edil tiene intención de firmar el decreto, bien esta semana o la que viene. Entretanto, desde la asociación de vecinos de San Marcos, su presidenta, Aurora Pérez, confió en que el regidor no demore demasiado este paso. «Tenemos la necesidad urgente de que el alcalde ratifique esta decisión una vez tenga la documentación de la mesa en su poder».

Del mismo modo, Pérez trasladó la satisfacción de los vecinos por la comprensión de los integrantes de la Mesa del Botellón, formada por varias concejalías del Ayuntamiento, asociaciones juveniles y los propios residentes afectados. «Ya son muchos meses los que llevamos sufriendo las consecuencias del 'botellón'. Siempre hemos pedido que se atajen las alteraciones de orden público, los ruidos y la inseguridad ciudadana generada, así como la gran cantidad de comportamientos incívicos por parte de un sector».

Solucionar el problema

En este sentido, la presidenta de los vecinos reconoció que se han consumido una gran cantidad de recursos municipales para controlar la problemática -principalmente policía y limpieza-; pero posteriormente se ha demostrado que esos recursos eran insuficientes». Aurora Pérez recordó que la actitud de la asociación ha sido «siempre solucionar el problema» mediante los cauces legales.

En este sentido, uno de los argumentos que más han pesado sobre la Mesa del Botellón, que funciona desde hace tres años, ha sido el incumplimiento sistemático de la Ordenanza de Convivencia en lo concerniente a ruidos, micciones en la vía pública, destrozo de mobiliario urbano, etc. «Ha sido un camino largo y lento que se inició desde la soledad del que denuncia un problema y al que poco a poco se han ido sumando los diversos sectores sociales. Al final, se impone la razón».