Los cimientos de la resurrección
Catalá anunció en la clausura de la Bienal Iberoamericana de Arquitectura que los profesionales serán clave en el próximo Plan de Infraestructuras 2012-2024 El secretario de Estado de Vivienda cierra la cita con una promesa de apoyo a la profesión
CÁDIZ. Actualizado: GuardarPocos sectores profesionales han sufrido la recesión, el desplome del consumo y la parálisis de la construcción como el de los arquitectos. En la VIII Bienal Iberoamericana de Cádiz han coincidido los estados de ánimo de las dos orillas. La pujanza de los americanos, inmersos en los mayores ciclos de crecimiento económico que han vivido en décadas, y la depresión colectiva de los españoles, afectados por el mayor bloqueo financiero y de proyectos que hayan sufrido en el mismo periodo.
Más allá del análisis de las posibilidades, del estudio de proyectos pasados, en ejecución o futuros, de los pormenores de escuelas, estilos y trayectorias colectivas o particulares, en la Bienal de Cádiz flotaba la misma pregunta que ahora preside cualquier reunión profesional: ¿Qué va a ser de nosotros?
«Cambio de rumbo»
El secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Rafael Catalá, trató de responderla en la clausura de un encuentro que ha convertido Cádiz en punto de encuentro mundial de la profesión durante cinco días.
Sabedor de las dificultades laborales y económicas por las que pasa, adelantó que la difusión y la promoción de la arquitectura será uno de los ejes «principales» de la acción del Ministerio de Fomento y una de las líneas de actuación «fundamentales» del Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda 2012-2024.
Catalá indicó que en dicho plan se considera la promoción de la arquitectura como un instrumento «básico» para contribuir a «la cohesión social y territorial, la competitividad económica y la sostenibilidad». Es decir, cuenta con los profesionales del sector. Además, ha señalado que ante la «difícil» situación del sector, desde Fomento se está promoviendo «un cambio de rumbo» que estimule una nueva cultura enfocada a la recuperación, la regeneración y la renovación urbanas.
El objetivo, detalla, es impulsar la «reconversión y reactivación» de la actividad profesional y de la edificación, «prestando especial atención al fomento de la innovación, la sostenibilidad y la eficiencia energética».
