ROMERÍA NAVAL

En Cádiz cada día gusta menos una manifestación. Nos molesta la gente gritando y las únicas agrupaciones de gente que nos gustan ver por la calle son una procesión. Vamos yo no sé si este año más que celebrar el Bicentenario de la Constitución, Cádiz lo que está celebrando es el bicentenario del Catecismo, porque no hay día en que no salga a pasear un santo.

Por eso, los trabajadores de Astilleros y todos aquellos que quieran manifestarse en la ciudad deben de cambiar de estrategias y de hábitos, sobre todo de lo segundo y ya verán como así no habría tantas protestas, que la gente de orden de Cádiz está muy sensible. Ojalá, por cierto, fueran tan sensibles los de orden con lo de Bankia, que en ese tema están más callados que en misa.

Así yo propongo que en vez de manifestaciones celebremos romerías. Los trabajadores de Astilleros, los de la administración, los de las industrias, deben dejar los monos de trabajo en sus casas y lucir para las manifestaciones sus 'peazos' de pantalones de esos 'ajustaos' como los que llevan los del Rocío que parece que dentro del pantalón se han escondido una empanada de la Catedral.de ahí el bulto.

Cascos no, sombreros de ala ancha y ellas, más que con las batas de trabajo, con batas de cola y si me apuran, de mantilla. Manifestarse en romería tiene mucha más ventajas. La Guardia Civil en vez de darte pal pelo, te da hasta gomina para que vayas con el tupé más plano que el carril de rodadura del aeropuerto de Barajas. Además a las romerías las escoltan, mientras las manifestaciones se 'coltan', otra gran ventaja.

Hay que olvidarse de las pancartas y ensayar, en las asambleas, sus buenas sevillanas reivindicativas que a la gente no le gusta leer y le parecen largos hasta los textos de las pancartas. Con la música se llega mejor. Por ejemplo en vez de esa frase ya antigua de «Astilleros no se cierra» se podría cantar «Amaribiri, Astilleros ya está aquí», cosas que no molesten a la gente. Porque no importa que la gente se esté quedando parada, lo importante es no molestar a la gente de orden de Cádiz.

Menos manifestaciones y más romerías. Los comités de empresa deben desaparecer y convertirse en juntas de gobierno. Nada de presidente del comité, sino hermano mayor y el portavoz que sea el que mejor toca la flauta y el tamboril, rin, rin. Que no sean afiliados de Comisiones Obreras sino hermanos del Perdón, que eso es lo que parece que hay que pedir aquí cuando alguien se manifiesta.

Ya lo dijo el otro día la ministra Bañez, la de Trabajo, que la Virgen del Rocío está por arreglar la crisis. Los trabajadores debemos de ponernos a ello. Cantemos todos: Menos manifestaciones y más romerías, menos griterío y más fervor mariano.