Imagen de los depósitos de Demagrisa en Zona Franca, junto a Puntales. :: ÓSCAR CHAMORRO
CÁDIZ

Demagrisa quiere reabrir su planta en Zona Franca para tratar residuos

Las instalaciones, junto a Puntales, llevan más de un año cerradas y la empresa ya ha contactado con el Consorcio para volver a la actividad

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Los directivos de la empresa Demagrisa han mantenido contactos en los últimos días con el nuevo delegado de Zona Franca, Jorge Ramos, para reabrir la planta que tienen en las inmediaciones de Puntales, en el interior del recinto fiscal. La compañía estuvo operando en Cádiz durante varios años, pero cesó su actividad en 2010. Desde entonces, las instalaciones se encuentran paradas y cerradas. Esta empresa se dedica al tratamiento de residuos industriales y la intención ahora es reanudar la actividad en Cádiz para procesar el aceite usado. Su planta de transformación se encuentra en la calle Alemania, en el parque empresarial de Poniente.

La sociedad, fundada en 1960, tiene en los puertos de Barcelona, Valencia y Málaga sus instalaciones de carga, descarga y almacenamiento de todo tipo de líquidos a granel, excepto inflamables. Todos los depósitos de estas factorías se encuentran conectados a los muelles de atraque mediante oleoductos subterráneos, entre otras conducciones. Las instalaciones de Demagrisa están compuestas por depósitos metálicos, con diversas capacidades unitarias y una red interior de distribución.

La dirección de Zona Franca ha sido receptiva a esta nueva iniciativa empresarial, de la que no han trascendido, de momento, ni la mano de obra necesaria ni tampoco la inversión para poner en marcha la factoría.

El recinto fiscal ha sido objeto en los últimos tres años de dos grandes inversiones. Por un lado, la nueva fábrica de pastas de Oromas, vinculada a la de Harinera Vilafranquina, que se ha instalado en el muelle de La Caebuela, y por otra parte, Procosur, que abrió su nueva sede el pasado diciembre. La nueva planta de Procosur para el tratamiento de pescado ocupa 9.000 m2 en los que ha introducido la última tecnología.

En total ha contado con una inversión de 21 millones de euros, de los que casi 10 los han puesto el recinto fiscal para avalar la inversión empresarial, quizá la mayor que se ha hecho en la ciudad en los últimos años.