Las alegaciones son el último obstáculo para la ordenanza del carril bici

Desde que se comenzó a gestionar la polémica ha perseguido al carril bici en San Fernando. Desde la planificación de los tramos hasta la ejecución de la obra y, cómo no, la normativa que regula el paso de ciclistas, peatones y vehículos por la ciudad. Cada paso que se ha dado ha estado acompañado por críticas, pero el proceso está a punto de llegar a su fin, o no.

El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) ha publicado la nueva ordenanza municipal de Circulación de Peatones y Ciclistas, lo que significa que a partir de ahora existe un plazo de un mes para la presentación de alegaciones. En el caso de que durante el citado plazo no se presenten reclamaciones, se entenderá definitivamente adoptado el presente acuerdo hasta entonces provisional. Pero parece poco probable que esto ocurra debido al desacuerdo manifiesto de distintos grupos políticos y colectivos, además de los problemas que se acumulan.

El principal es el estado en el que se encuentran los carriles. En el pleno del 28 de enero se acordó por unanimidad de todos los partidos políticos la constitución de una Comisión de Seguimiento del Plan Director de transporte en Bicicleta, compuesta entre otros por un miembro de cada grupo político del Ayuntamiento y un representante de cada colectivo con representación en el que Consejo de Participación Ciudadana, a fin de verificar el estado de ejecución de las obras de los carriles bici antes de que estas sean recepcionadas por el Ayuntamiento. Esta comisión no se ha creado y se desconoce si la actuación ha sido o no recepcionada por el Consistorio.

Multas

A pesar de la situación en la que se encuentran algunos tramos del carril bici, la ordenanza ha salido para delante. Un documento que intentará que vehículos y viandantes convivan sin que surjan problemas, y como es normal para que se cumplan sus directrices se han dictado una serie de sanciones. Caminar de forma prolongada por el carril bici se considera una infracción leve y se castigará con 100 euros. Circular en bicicleta por aceras o zonas peatonales superando los 10 km/h y sin respetar al peatón se trata de una infracción grave, por tanto la sanción podría ascender a unos 200 euros.

Además también se estipula como infracción muy grave la conducción de bicicletas bajo los efectos del alcohol, drogas tóxicas o estupefacientes. En este caso la sanción sería considerable ya que podría llegar hasta los 500 euros.