El PP presenta en su congreso una ponencia que defiende los matrimonios gays

El XVII Congreso Nacional del PP, que va a celebrarse en Sevilla entre el 17 y 19 de febrero, tiene previsto incluir una ponencia que reivindica en un párrafo -modesto pero contundente- la dignidad de los homosexuales y su plena equiparación legal con los heterosexuales. El documento, bajo el lema 'Comprometidos por España', pretende fijar el posicionamiento futuro del PP, ya sean pautas sociales o estrictamente políticas.

He aquí un resumen del punto 28 de un texto que, en su integridad, ha redactado Antonio Basagoiti, presidente del PP en Euskadi, por encargo del propio presidente de Gobierno, Mariano Rajoy: «(...) Los españoles somos iguales ante la ley (...) Mostramos nuestro compromiso con el reconocimiento de los derechos de las personas homosexuales, para elevar a la categoría legal y política de normal lo que en la calle es plenamente normal».

¿Lo aceptará sin enmiendas el bloque más tradicional del Partido Popular? Basagoiti ya ha adelantado que ni pactará ni transigirá. O todo o nada. «Voy a defender, sin ningún tipo de complejo, que no haya ninguna discriminación con los homosexuales y que se cumplan todos sus derechos», dejó zanjado hace el pasado jueves.

El dictamen

Con esta fórmula abren la puerta a la consolidación de los matrimonios de gais y lesbianas. No son explícitos, por la sencilla razón de que el Tribunal Constitucional todavía no se ha pronunciado sobre la constitucionalidad de la ley que regula estas bodas. Una paradoja: el recurso contra la normativa fue interpuesto por 50 diputados del PP en 2005, con Eduardo Zaplana a la cabeza, que entonces era portavoz del grupo parlamentario en el Congreso. Así se entiende que Soraya Sáenz de Santamaria, vicepresidenta del Ejecutivo, repita una y otra vez que ni el partido ni el Gobierno pueden echar para atrás la impugnación de la ley. Eso corresponde única y exclusivamente -según el Derecho Procesal puro y duro- a los 50 parlamentarios que protestaron hace siete años.

El Gabinete de Rajoy espera pacientemente el dictamen del Alto Tribunal pero, a la vista del documento que se presentará en Sevilla, queda claro que hace suyos los derechos de los homosexuales. Su pretensión es que puedan seguir casándose, con el mismo rango que los heterosexuales. Cosa distinta es cómo se llame a los enlaces, ya sea 'matrimonios' o no.