LLEGA LO BUENO

Ya llega la hora de la verdad, el año 2012 y el jugarnos el ascenso a Segunda División. Se acaban las excusas. Ya no se debe hablar de tiempo para conjuntar el equipo, que si los campos son malos, que si los arbitrajes. Cualquier error puede ser dramático, y por drama entiendo perder el liderato. Todavía recordamos lo que es venirte humillado de Miranda de Ebro. Hay que ser líderes, lo que nos da dos oportunidades de ascender. Esperemos que el primer tramo de la temporada haya dado sus frutos en cuanto al empaque del equipo. No se puede mirar atrás, sino adelante y dar el definitivo golpe de autoridad para que nuestros rivales sepan que este año el Cádiz va a subir, siío sí. Si no se logra el ascenso, las consecuencias serían dramáticas para los cadistas. Viendo las cuentas publicadas del Cádiz, si no se consigue el ascenso, hay cierto peligro de disolución del club. Y eso solo le importa a los cadistas. Entrenadores y futbolistas son profesionales y se irán a buscarse su pan a otro lado, pero el club se queda sin ascenso. Pongan todo lo que tengan en conseguirlo. La institución se juega mucho, nada más y menos que su subsistencia, y eso ineludiblemente pasa por el ascenso. No miren para otro lado, ni a la afición ni a la prensa, solo al balón, y consigan que éste entre en la portería rival más veces que en la nuestra. Parece fácil, pero sin ningún lugar a dudas no lo es. Si se apuesta a ganar es más fácil que si se apuesta a no perder. Ese es el camino. Mucha suerte a todos, cuerpo técnico, jugadores y dirección deportiva. Su suerte es la de todos los cadistas. Nos quedan seis meses apasionantes, en el que el nivel de exigencia debe ser máximo, porque eso sí va a ayudar a conseguir el objetivo. No perdamos fuerza en distracciones y centrémonos solo en lo deportivo, que ese debe ser el fin de los profesionales que están en nuestro equipo para que podamos todos celebrar el ansiado ascenso. Todos los cadistas nos lo merecemos, sin ningún lugar a dudas.