Los vecinos harán sus propuestas al nuevo servicio de autobús

Los representantes de las asociaciones de vecinos de la ciudad fueron informados de primera mano sobre los cambios y la reestructuración que la concejalía de Medio Ambiente tiene previsto efectuar en el servicio de autobuses urbanos durante los próximos meses. La concejala del ramo, Marta Rodríguez, dejó claro que en ningún momento estas variaciones supondrán un recorte en el servicio.

La propia edil había pedido mantener este encuentro con el consejo vecinal de la Federación Local de Asociaciones de Vecinos, Flave, en el que estuvo acompañada por dos técnicos del área. Rodríguez explicó que los tres grandes objetivos planteados en el servicio desde que la nueva empresa, Daibus, se hiciera con la concesión administrativa, son, por un lado, reducir los tiempos de espera en las paradas, potenciar las líneas más frecuentadas por los usuarios y adecuar las líneas del extrarradio. La finalidad no es solo que sean viables económicamente, sino que se adapten a las necesidades de la población a la que se le presta el servicio. Los técnicos recalcaron que la pretensión es mejorar el servicio de autobuses y a la vez hacerlo mas sostenible económicamente, pero que en ningún caso esta restructuración supone en su conjunto un recorte del mismo. El presidente de la Flave, José Rodríguez, explicó que después de abrir un turno de palabra por parte de los asistentes en el que se expresaron algunas sugerencias, se quedó en que una vez visto por las asociaciones vecinales con sus vecinos y vecinas, el área quedaba a disposición de las ideas que los colectivos planteen. Unas propuestas cuya viabilidad tendrá que ser evaluada por parte de los técnicos.

Subida de tarifa en enero

Sobre lo que no se pronunciaron los vecinos fue sobre la subida del billete univiaje, que desde el próximo enero pasará de 0,85 céntimos a un euro. Una medida con la que se mostraron disconformes en su día y que ha sido justificada por el Ayuntamiento en la necesidad de reducir el alto déficit del servicio y fidelizar el uso del bonobus.

Por otro lado, la nueva empresa, que recientemente incorporó ocho vehículos más a su flota, continúa con su inversión tecnológica que persigue incrementar el número de usuarios con facilidades como información sobre el tiempo de espera de las distintas líneas.

En otro orden de cosas, el consejo vecinal también sirvió para abordar las dificultades económicas que atraviesa tanto la Flave, que ya debe dos meses de salario a su administrativa y abandonará su sede en enero, como el resto de las asociaciones de vecinos.

La causa es el «estrangulamiento» al que los mantiene el Ayuntamiento con el impago de las subvenciones comprometidas. «Desde las asociaciones le pedimos al alcalde, Enrique Moresco, que reconsidere la situación a la que se le viene sometiendo al movimiento vecinal, ya que nunca nos hemos encontrado en esta tesitura en todos los años que llevamos de democracia». Independientemente de los problemas económicos, la Flave pretende seguir adelante con su labor en la medida de lo posible y por ello el consejo aprobó el plan de trabajo elaborado por la junta directiva para los próximos cuatro años.

En dicho plan se contempla el trabajo que las distintas áreas que la junta directiva de la Federación proyecta tanto en lo concerniente a urbanismo, mantenimiento urbano, medioambiente, acción social, emigración, jóvenes, mayores, mujeres así como todas aquellas tareas propias de la federación como secretaria y administración.