Los empleados del hospital de San Carlos temen que el centro cierre

Hay quien habla de un cierre parcial, otro de un cierre técnico y ha quien es más drástico y asegura que se está planeando un cierre total de las instalaciones sanitarias del hospital de San Carlos. Lo que más preocupa a la plantilla es que a pesar de todos los rumores que han surgido en las últimas semanas y de las constantes peticiones de información a Defensa, el Ministerio ni siquiera se haya pronunciado al respecto para calmar los ánimos y garantizar el futuro del edificio. Sobre todo cuando en plena campaña la consejera de Salud, María Jesús Montero, aseguró en la ciudad que se estaban dando pasos para la apertura pública de San Carlos y que se barajaban diferentes opciones para llevar esta medida a cabo.

Aún así, los trabajadores no se fían y aseguran que soportan el peso de la incertidumbre ante la evidencia de que la infraestructura está «siendo infrautilizadas». Es más, la propia plantilla habla de la necesidad que tiene la ciudad para que el centro esté funcionado a pleno rendimiento. «Está claro que sus instalaciones y personal podrían contribuir a mejorar la asistencia sanitaria en San Fernando y ser el Hospital de referencia que la localidad necesita».

Por ello, se manifestaron ayer así como por el retraso en cuanto a la estatutarización de su personal, que constituye para la plantilla «otra muestra de la indefinición del Ministerio de Defensa». Para ellos la convocatoria del proceso de estatutarización supondría un primer paso en la dirección de apostar por la continuidad de este Hospital. Un proceso que además permitiría que los trabajadores (aproximadamente unos 250) equiparan su sueldo al de los profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

Además con el agravante de que existen otros compañeros que cobran más que ellos en su misma situación. Es el caso de los que trabajan en los centros de Madrid y Zaragoza. Allí la equiparación se dio hace meses. Este proceso comenzó a aplicarse en el Gómez Ulla de Madrid en enero del año siguiente y finalizó meses después, en el mes de noviembre. Un mes antes, comienza a implantarse en Zaragoza y Melilla. En el primero termina en mayo del año pasado y en el segundo, en marzo. De esta manera, en tres centros hospitalarios esta mejora, esta equiparación, está ya finalizada cuando en otros dos (al de San Fernando hay que sumar otro centro hospitalario en Ceuta) siquiera ha comenzado su implantación.

Y todo ello cuando los colectivos sociales de la ciudad continúan exigiendo que el hospital se abra al público de manera inminente ya que precisan de una serie de servicios y especiales que actualmente la ciudad carece. Entre las reclamaciones más inmediata está la del parto, ya que para tener un niño los isleños tienen que desplazarse hasta Cádiz o Puerto Real.

Actualmente solo están siendo utilizadas dos plantas del edificio y para los ciudadanos sería una de las mejoras sanitarias más importantes para la ciudad, tras la apertura de una nueva sede de urgencia y el inicio de la construcción del centro de salud de Camposoto.