Prisión por cometer tres robos e intentar otros dos en un día

La aventura comenzó para ellos el pasado 18 de diciembre, a partir de las 18.00 horas. En tan solo cuatro horas, dos hermanos y su compinche (B. P. N; J. P. N. y A. M. R) robaron presuntamente un coche, cometieron otros dos robos y apunto estuvieron de perpetrar dos más, hasta que la Policía les paró los pies.

Algo más de un mes después, el Juzgado de Instrucción número 1 de Jerez ha ratificado la prisión para los tres individuos, que permanecerán entre rejas hasta que se celebre el juicio. Como ha sabido LA VOZ por fuentes del caso, todo comenzó con el robo de un Opel Vectra con el que se trasladaron a la tienda de productos chinos 'El Kanito', donde lograron en poco tiempo hacerse con la recaudación que había en caja en ese momento.

Seguidamente se dirigieron a Valdelagrana y pararon en la gasolinera del Palmar, si bien la abandonaron rápidamente al percatarse de que no podían robar nada, pues estaba cerrada. Según las mismas fuentes, a eso de las 22.00 horas llegaron a la gasolinera BP de la misma zona, en la que ataviados con un mazo y una palanqueta de hierro amedrentaron a un empleado que se encontraba fuera pidiéndole dinero.

Éste les advirtió que su compañero estaba en el interior del local y ya había pulsado el botón de auxilio, por lo que huyeron precipitadamente. A las 22.15 aparcaron en la estación de servicio Shell y allí rompieron el cristal de la puerta, increpando a una empleada que se había parapetado en un cuarto de seguridad. Afortunadamente, la mujer logró huir con otra compañera que estaba montada ya en su coche y juntas pudieron avisar a la Policía.

Cuando los agentes llegaron, pillaron a los individuos con la caja registradora en la mano, por lo que los detuvieron y trasladaron a Comisaría. Como informaron estas fuentes, los tres cometieron presuntamente los delitos bajo un pasamontañas, por lo que de no haberles cogido in fraganti su identificación habría resultado bastante complicada.

Numerosos antecedentes

Una vez en el juzgado, los detenidos reconocieron el último robo cometido pero no el resto. No obstante, el amplio historial delictivo de los tres, cuyas edades oscilan entre los 25 y los 40 años, ha sido decisivo para que se ratifique la prisión provisional. A falta de que se califiquen los delitos, la Fiscalía podría acusarles de presuntos robos con violencia y amenazas, dándose la circunstancia de que uno de ellos ya se ha convertido en reincidente.