Más de un centenar de personas integra ya la asociación de anticoagulados

¿Cómo disfrutar de una vida normal cuando el riesgo de coagulación de la sangre obliga a una continua medicación? La disciplina, el control médico y la atención hacia la dieta son las claves para que el Sintróm, anticoagulante oral más habitual, no domine la vida del paciente. Unas cuestiones que se abordaron en la charla organizada por la Asociación de Pacientes Cardíacos y Anticoagulados de El Puerto, que ya cuenta con un centenar de socios.

El hotel Santa María acogió el acto que contó con las ponencias del doctor Antonio Paz Coll, Director de la Unidad de Gestión Clínica de Hematología del Hospital Universitario de Puerto Real; así como de Yolanda Romero Nimo, coordinadora de Cuidados del Centro de Salud Puerto Sur. Un departamento de reciente creación donde los pacientes reciben un trato más cercano y eficaz.

La presidenta de ACAP, Josefa Aibar, explicó que el colectivo lleva un año en funcionamiento. «Estábamos adscritos a la asociación de Cádiz y decidimos fundar una propia en El Puerto para funcionar de una forma más efectiva». Con una sede en el edificio de la delegación de Bienestar Social, los miembros de ACAP han creado una red de visitas a los enfermos cardiópatas en los hospitales y en sus domicilios, con el objetivo de apoyarlos a través de las experiencias de personas que han pasado por la misma situación. «También mantenemos contacto con especialistas en cardiología, hematología... Con el objetivo de conocer mejor nuestra enfermedad y los adelantos que se consiguen en el terreno de los fármacos». En este sentido, el doctor Paz Coll avanzó que ya se ha patentado un nuevo medicamento, que se encuentra en pruebas.