EL TRANVÍA

LA CIUDAD DEL FLAMENCO

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Es uno de los proyectos estrella de la legislatura en Jerez y a día de hoy no se sabe muy bien qué será de él, ni siquiera si finalmente podrá acabar tirando para adelante. La razón, la misma que en otras ocasiones, idéntica a la que paralizan numerosos proyectos en esta ciudad y en prácticamente toda la geografía española: la falta de fondos. De todo ello tendrán cumplida cuenta en un reportaje que publicaremos mañana en estas mismas páginas, así que las siguientes líneas las destinaré a narrar parte de los movimientos políticos que se han producido en los últimos días en torno a este importante proyecto.

Resulta que este proyecto ha sido uno de los grandes olvidados en los Presupuestos Generales del Estado para 2011. Para ser más exactos, cabría decir que no ha sido del todo así, sino que ha destinado únicamente 1,7 millones de euros al mismo. La cifra es bastante inferior a lo que se necesitaría para poder tirarlo adelante y que esté listo para el Año del Flamenco en 2013. La cosa tiene miga, y mucha. El Ayuntamiento sabe que se está jugando mucho, básicamente porque se trata de una de las inversiones estrella previstas para este mandato y ahora parece estar más en el aire que nunca. Y no olvidemos tampoco, aunque haya quien ose decir que eso no tiene nada que ver, que dentro de ocho meses hay unas elecciones municipales que se presentan más apasionantes que nunca.

Por eso se está moviendo para tratar de arreglar el problema. Quiere conseguir una enmienda de los Presupuestos que incluya más dinero, el suficiente para garantizar su supervivencia. No lo va a tener fácil, y quizá por eso está llamando a (casi) todas las puertas que puede o debe llamar. En cualquier caso, no pasará mucho tiempo hasta que sepamos qué pasará.

Conviene tener en cuenta, también, que en el PSOE están intentando ahora escenificar una unidad sin fisuras en torno a la figura de Pilar Sánchez. El pasado lunes ya se intentó una foto en ese sentido. Se había convocado a los medios de comunicación locales para una supuesta reunión que la alcaldesa iba a mantener con diputados del partido, incluidos los que no son precisamente afines. Estaba prevista para las nueve y media de la mañana, pero apenas 40 minutos antes se notificó que quedaba suspendida. Evidentemente, las interpretaciones y especulaciones sobre los motivos se dispararon. Las hubo para todo los gustos. Uno tiene las suyas propias, pero prefiero guardármelas hasta ver cómo evolucionan los acontecimientos en las próximas semanas y meses. Porque, qué quieren que les diga, pero me cuesta creer que el Partido Socialista vaya a ser capaz de cerrar realmente filas en torno a la figura de la candidata a la Alcaldía de Jerez. Incluso aunque consigan la foto que algunos andan buscando. Las heridas todavía no han cicatrizado, ni creo que vayan a hacerlo en mucho tiempo.