Economia

El BCE eleva el crecimiento de la zona euro

Trichet llama a la cautela, aunque pronostica un mayor avance del Producto Interior Bruto y una contención de precios

BERLÍN. Actualizado: Guardar
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Hace diecisiete meses, el Banco Central Europeo (BCE) tomó una decisión expeditiva para impedir que la crisis económica y financiera mundial hiciera estragos en la zona euro: bajó sus principales tipos de interés al 1 %. En el arranque del curso, el Consejo de Gobierno de la entidad mantuvo inalterables los tipos pero pudo, por fin, enviar un mensaje de esperanza a los países que adoptaron la divisa comunitaria.

Después de meses de zozobra, el BCE anunció una sustancial mejora de las expectativas de crecimiento de la zona euro en 2010 y 2011, un pronóstico que podría conllevar el fin definitivo de la crisis en el viejo continente. El presidente del banco, Jean-Claude Trichet, dijo que los economistas de su equipo esperan una mejora del Producto Interior Bruto (PIB) en una banda del 1,4 % al 1,8 % este año, frente a las previsiones de entre el 0,7% y el 1,3 % que fueron anunciadas en junio pasado.

Las expectativas de crecimiento para 2011 se elevan a un rango del 0,5% y el 2,3 % frente a las anunciadas en junio, que vaticinaban una expansión de entre el 0,2% y el 1,2 %. Pero Trichet dejó claro que las perspectivas siguen siendo inciertas, un panorama que ha influido en la decisión de la institución para seguir ofreciendo a los bancos comerciales del área toda la liquidez que necesiten en las operaciones de refinanciación con tres meses de vencimiento

Cautelas

«Tenemos que ser prudentes y no podemos cantar victoria», dijo Trichet al comentar los nuevos pronósticos de la economía. Reconoció que los datos ahora difundidos habían sido más expansivos de lo esperado, pero recordó que habían influido «factores temporales», como la depreciación del euro. Aún así, descartó una nueva recesión. «Ya he dicho que la recaída no es una hipótesis incluida en nuestros análisis», enfatizó.

Ayer, la oficina estadística europea confirmó que el Producto Interior Bruto, tanto de la zona euro como de los Veintisiete, creció el 1% en el segundo trimestre respecto del primero y el 1,9% con relación al periodo abril-junio de 2009.

Según el avance de datos, el gasto de consumo de las familias europeas registró un incremento del 0,5% en el segundo trimestre, mientras las inversiones progresaron nada menos que el 1,8%. Pero el verdadero motor del crecimiento fue el sector exterior. Las exportaciones crecieron el 4,4% en la zona euro, el mismo porcentaje de incremento que registraron las importaciones en ese periodo. Europa se vio favorecida de la recuperación de los intercambios internacionales.

Se confirma que España ha quedado rezagada, mientras tanto, con una evolución de su Producto Interior Bruto que todavía presenta un retroceso interanual del 0,1% respecto al segundo trimestre del pasado ejercicio y un moderado avance del 0,2% en comparación con los meses iniciales de este año.Con respecto a los precios, el Banco Central Europeo también ofreció buenas noticias al consumidor. Las presiones inflacionarias a medio plazo están bajo control gracias al limitado crecimiento de la oferta monetaria y el crédito. «Pensamos que los precios permanecerán estables, apoyando así el poder adquisitivo de los hogares», dijo.

Sin embargo, el presidente del BCE evitó dar informaciones concretas sobre la fecha en que la institución podría poner fin al programa de compra de bonos del Estado, aunque fue generoso a la hora de anunciar la prolongación de la llamada 'barra libre', una expresión utilizada para referirse a la decisión de la entidad de proporcionar a las bancos tanto dinero como le pidan y a un interés fijo.

Liquidez

La decisión de ampliar su red de seguridad de liquidez para los bancos vulnerables con el compromiso de dar financiación ilimitada a una semana y a un mes seguirá siendo válida hasta el 18 de enero del próximo año. El BCE también ofrecerá fondos ilimitados en su programa de préstamos a tres meses hasta final de este año.

Trichet volvió a recordar ayer que estas medidas son temporales y que no suponen una señal de política monetaria, que «sigue siendo acomodaticia» y aseguró que el BCE «hará todo lo que esté a su alcance para mantener la estabilidad de precios en la zona euro a medio plazo».

Por otro lado, el Riksbank, el banco central de Suecia, subió su tasa en 25 puntos básicos, hasta el 0,75%, tras revisar también al alza sus proyecciones de crecimiento para este año hasta el 4,1%, frente al 3,8% pronosticado anteriormente. En EE UU los tipos se sitúan actualmente entre el 0 y el 0,25% y en Japón en el 0,1%.