Los hoteles sacan partido de la huelga encubierta de controladores

Los que hasta el pasado fin de semana no tenían claro su destino de vacaciones han apostado por lo seguro: «nos vamos a la playa y ya dejaremos el viaje a Berlín para otro año». La huelga encubierta de controladores, que la semana pasada provocó retrasos en los principales aeropuertos de España, ha coincidido con un aumento considerable de las reservas hoteleras en Cádiz. La impresión era compartida por varios empresarios del sector y ayer mismo lo confirmó el presidente de la patronal, Antonio Real.

«Las incidencias en los aeropuertos pueden tener mucho que ver con este último tirón de julio, aunque estamos en temporada alta y nuestra costa es un destino con mucha demanda», reconoció. También explicó que la mayoría de los que han optado por la Costa de la Luz a última hora para evitar los retrasos «son los que no tenían una reserva pendiente». A pesar de todo, el incremento de solicitudes le ha sorprendido. Aún es pronto para saber el grado de ocupación para lo que queda de julio y todo el mes de agosto, pero desde la patronal asegura que esperan cumplir todas las expectativas.

Los empresarios consultados coinciden al atribuir el interés por la playa gaditana a esta incidencia. Explican que «a nadie le gusta pasar las vacaciones esperando o impacientándose porque un retraso no les permita llegar a tiempo al siguiente vuelo» y a la provincia se puede llegar por ferrocarril o carretera fácilmente desde cualquier punto de España.

Más ahorradores

El responsable de la patronal reconoció ayer que, tal como está la situación, «cabía esperar un descenso, pero por lo pronto, las cosas siguen más o menos igual que el año pasado». Mismo número de visitantes, pero menor gasto. Eso sí, el balance final se verá sin duda afectado. «Los turistas cada vez miran más por el bolsillo, a pesar de las buenas ofertas lanzadas por los hoteles gaditanos».

De una manera u otra, los alojamientos van a aprovechar este pequeño repunte para vender la oferta turística de toda la provincia. «Nuestra intención es que eso repercuta en todos los municipios, porque los de interior también tienen una buena infraestructura para disfrutar y una gran riqueza de patrimonio».

En cuestión de reservas, la cosa ha sido distinta. Apenas se han producido cancelaciones, como aseguró ayer Ángel Juan Pascual, presidente de la Cámara de Comercio y de la Asociación de Agencias de Viajes. Reconoce que la huelga encubierta «ha supuesto toda una psicosis, que por suerte ha durado pocos días», sin embargo, considera razonable que el que no tuviera un plan fijo optara por lo seguro. En el caso de la provincia no ha tenido una gran repercusión y de hecho, el aeropuerto jerezano apenas se ha visto afectado.

Lo que ha supuesto una verdadera alternativa al avión -y no sólo por los retrasos de los vuelos, sino por las buenas ofertas- son los cruceros. Pascual recalca el éxito de esta modalidad, hasta hace poco reservada sólo a bolsillos privilegiados. «Los precios son mucho más asequibles gracias al aumento de la competencia y ya se ofrecen paquetes en los que se incluye el traslado hasta el mismo puerto de salida».

Bares y restaurantes están a la expectativa de que realmente la huelga atraiga un mayor número de turistas. El presidente de la patronal Horeca, Antonio de María, no se mostraba ayer convencido del todo. Además, criticó las dificultades para viajar a Cádiz desde Madrid en el Alvia. «No quedan billetes libres hasta septiembre y la mayoría de pasajeros se siguen bajando en Córdoba y Sevilla». A pesar de que Renfe lo ha negado, De María insistió en que «no hay nada más que acercarse al andén de la estación para ver que apenas se bajan veinte o treinta viajeros en la capital». Al menos recibió la buena noticia de que Air Nostrum abre nuevas líneas a Jerez desde Valencia y Bilbao.