Lorenzo Cherbuy, en su casa y taller, durante una entrevista concedida a su nieto días antes de recibir un homenaje en el Ateneo. :: M. GÓMEZ
Sociedad

El pintor gaditano Lorenzo Cherbuy fallece a los 89 años de edad

Estaba considerado como uno de los artistas más importantes de la provincia gracias a su prolífica y variada obra

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Se ha marchado uno de los artistas más prolíficos y versátiles de la provincia. Ha dejado para siempre su Cádiz natal, a la que recordó en tantas ocasiones y a su gran familia -tuvo 14 hijos-. Ha dejado un sinfín de piezas y un reguero de reconocimientos. Aunque nunca serán suficientes para valorar la vida y obra de Lorenzo Cherbuy, (Cádiz, 1921), que fallecía ayer en su casa de la barriada de Puntales de forma natural. Ni siquiera el Párkinson que padecía desde hace varios años había podido con su ingenio y pincel. Hasta hace dos meses, cuando la enfermedad y los achaques propios de una vejez que exprimió al máximo le impidieron seguir.

Hace poco más de un año el pintor resumía en una entrevista concedida a su nieto periodista los pormenores de su dilatada carrera. Esa que le ha llevado a ser considerado uno de los grandes artistas gaditanos de la segunda mitad del siglo XX. En esa entrevista Cherbuy explicaba que no le importaba que su nombre no figurase en algún museo de arte contemporáneo. «Mi obra se parece más a la de Altamira», bromeaba. También hacía gala de su otra pasión, la literatura. Y es que fue su vinculación con el grupo poético gaditano Platero el origen de tantas décadas de productividad. Corría el año 1948 y empezaba a forjar amistad con otros grandes de la provincia como Pilar Paz Pasamar o Fernando Quiñones. De formación autodidacta, Lorenzo Cherbuy colaboró en varias revistas nacionales y participó en exposiciones colectivas en Sevilla, Madrid, Zaragoza y otras ciudades.

La Tía Norica

Durante varios años fue escenógrafo del grupo Gris Pequeño Teatro de Cádiz, que dirigieron Luis Balaguer y Mario Barasona. Algunas de las más importantes escenografías que realizó con este grupo fueron 'Los intereses creados' de Benavente, 'Don Juan', de Molière y 'El delantero centro murió al amanecer', de Cuzzani, entre otros. Todos ellos fueron puestos en escena en el Gran Teatro Falla de Cádiz, así como 'Don Durados', de Gil Vicente y 'El Recovero de Ucles' de Soto Vergés, en el Teatro de Bellas Artes de Madrid.

Además, las creaciones de este conocedor de la filosofía y el ensayo, entre otras disciplinas, cuelgan en las paredes de grandes empresas de Cádiz. También hizo marionetas para la Tía Norica, además de otra de la 'Pájara Pinta' de Rafael Alberti. «Yo hecho de todo: terracota, murales grabados, dibujos. Hice un busto de Fermín Salvochea, otro de Rodríguez de la Fuente en el Parque Genovésy hasta una virgen y un grupo de marineros para la Iglesia de Santa María de Rota», comentaba durante la entrevista, incapaz de precisar el número de obras que realizó a lo largo de su vida.

Con mucho aún que pintar y decir, Cherbuy hacía gala de su modestia. «Dicen que soy un maestro, pero yo no lo creo. Pinto porque me gusta. Además, se trabaja mejor desde el olvido», destacaba. En estos últimos años sus amigos y conocedores de su obra habían contribuido a aupar su figura al lugar que merece. En 2005 el Ayuntamiento de Cádiz le concedía la Trimilenaria. La misma semana que se publicaba la entrevista referida, el artista gaditano recibía un cálido homenaje en el Ateneo de la mano del poeta Jesús Serrano.

Los restos mortales de Lorenzo Cherbuy fueron trasladados al Tanatorio Virgen del Rosario de la capital gaditana, donde hoy se rezará un responso por su alma. Su cuerpo será incinerado después, a las 16 horas, en Puerto Real.