El nuevo chiringuito se ubicará en la misma zona de la Escuela de Surf. :: ÓSCAR CHAMORRO
CÁDIZ

Cortadura tendrá un nuevo chiringuito

Esta nueva apertura eleva a diez el número de establecimientos hosteleros sobre la arena que hay en las playas de la capital

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La playa de Cortadura contará con un nuevo chiringuito esta misma temporada, elevando a diez el número de este tipo de establecimientos en las playas de la capital. El Ayuntamiento sacó a concurso hace unos días la instalación de otro quiosco en la zona del litoral situado junto al antiguo Balneario de Cortadura, a la altura del primer acceso a la playa del mismo nombre.

El plazo de presentación de ofertas finalizó el pasado lunes, y en unos días, el Ayuntamiento dará a conocer el nombre del adjudicatario, para que éste pueda acometer cuanto antes la instalación de la estructura y comenzar a dar servicio esta misma temporada.

De esta manera, el Consistorio gaditano quiere seguir impulsando una zona de la ciudad que cuenta ya con tres chiringuitos -el nuevo, el de La Gallega y Nahú Bar- y que se está convirtiendo en un importante punto turístico, ya que se ofertan todo tipo de actividades relacionadas con el mar. De hecho, el nuevo quiosco estará situado a tan sólo unos metros del futuro Centro de Actividades Náuticas que se ubicará en el mismo módulo para fomentar la práctica de deportes como 'kitesurf', 'bodysurf' o vela, bajo el amparo municipal.

Cierre del bar

Precisamente fue la decisión de crear este nuevo equipamiento deportivo lo que provocó la retirada de la concesión al bar Estrella de Mar, que hasta el pasado 11 de junio ofrecía sus servicios de hostelería en los bajos del módulo de playa y respondía así a las necesidades de este tipo de negocios que existía entre los usuarios de esta parte del litoral gaditano. Han sido siete años los que ha trabajado en la zona este bar, que a partir de esta temporada será sustituido por este nuevo chiringuito, que además ocupará 150 metros cuadrados y estará construido con madera, siguiendo el mismo modelo que el resto de los quioscos de la playa.

El nuevo adjudicatario tendrá derecho a un año de contrato, que se podrá prorrogar otros siete más. Durante los tres primeros, el empresario estará exento del canon, ya que tendrá que asumir los gastos de apertura, y a partir del cuarto tendrá que hacer frente a 10.000 euros anuales, que irá subiendo cada temporada lo equivalente al incremento del IPC.