Sierra

Medio centenar de agricultores plantaron la semilla en los 80

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La relación del espárrago con Alcalá del Valle no es algo novedoso aunque en los últimos años sea cuando mayor importancia está tomando. En concreto, en los años ochenta ya había en la localidad una asociación de esparragueros que resultaron pioneros en Andalucía, junto los productores de Huetor Taja y Sierra Yegua. Comenzaron a cultivar la variedad arbón, espárrago blanco, pero el mercado terminó llevándolos al verde.

En el año 1991 se conformó en la localidad una cooperativa cerealista a la que terminaron uniéndose los 50 agricultores que había en la zona. Ellos producía unos 150.000 kilogramos que compraba un intermediario en bruto y éste se lo llevaba fuera del municipio para transformarlo. La cooperativa Los Europeos, para evitar esta pérdida, apostó por «serenar el mercado y afianzar el producto», destaca el gerente, Francisco Dorado.

«Poco a poco se fue haciendo necesario hacer crecer la producción», comenta Dorado, porque «con ese nivel no se podía invertir en infraestructuras para la transformación y aprovechamiento del valor añadido». Y estos fueron los pasos que se fueron dando hasta llegar a más de 1.400.000 kilogramos de espárrago producido y alcanzar, este año, las 30 hectáreas cultivadas.

El año 1999 fue clave para el desarrollo del espárrago de Alcalá del Valle. Ese año Los Europeos decidió lanzarse al mercado en solitario y crear las dos marcas que a día de hoy se siguen comercializando con gran éxito en Inglaterra, Francia y Alemania, entre otros países europeos. En concreto, los paraguas en los que se resguardan más de 3.000 jornales son Espasierra y Fuente Palos.

No obstante, todo el camino que el espárrago ha recorrido no ha sido algo placentero y sin complicaciones, ya que los problemas con la lluvia y el frío han provocado grandes dolores de cabeza a los agricultores. Además, se llevó a cabo un intento de envasar y enlatar los espárragos para poder reducir la estacionalidad del negocio pero «nos topamos con la realidad de las conservas que resulta complicado producirlas en España y competir con las de otros países con mano de obra más barata», destacó Dorado.

El buen trabajo de la Cooperativa ha posibilitado su crecimiento y la ampliación de la producción. Actualmente cuenta con 860 socios diferentes, algunos de ellos asociados a varias secciones. En total tienen 260 socios cerealistas, 190 esparragueros, 350 dedicados al olivar y 150 colaboradores.

Además, en el último año se ha lanzado a un proyecto muy ambicioso que está contando con una gran acogida. En concreto, se ha puesto en marcha la almazara de aceite que se preveía que molturara 1,2 millones de kilogramos de aceitunas y finalmente se han superado los cuatro millones.