El Ayuntamiento ya estudia cómo retirar el servicio a Cojetusa

Ya no hay marcha atrás, y el adiós de la empresa propietaria de Cojetusa -la multinacional FCC- a Jerez es cuestión de días. Ésa es la principal conclusión que se extrae de las palabras de la alcaldesa, Pilar Sánchez, que ayer puso de relieve un hecho más que constatable: «Es una empresa a la que ya no le interesa estar en Jerez, que no invierte en los autobuses y que está incumpliendo su obligación».

Por todos esos motivos, la primera edil quiso dejar claro ayer que el Ayuntamiento ya está estudiando cuáles son los pasos jurídicos que debe dar en caso de que tenga que rescatar la concesión del servicio firmada con Cojetusa y asumirlo de forma interina hasta que pueda sacarlo de nuevo a concurso.

La opción de que el gobierno municipal actúe directamente contra la actual concesionaria y le retire el servicio cobra fuerza, pero aún es un plan B en caso de que no se cierre la primera opción, la operación de compra por parte de Linesur, que anoche seguía estando abierta. Así lo recalcó la delegada de Movilidad, María del Carmen Martínez, que apuntaba que «todavía se están atando flecos, sobre todo en lo relativo a que Linesur pueda contar con el dinero necesario para entrar en la concesión, pero no se ha cerrado la puerta a que el acuerdo llegue». Es más, parece que la jornada de ayer fue bastante positiva en lo referente a la negociación con las entidades bancarias.

Martínez no ocultó ayer que la opción que más le gusta al gobierno local es la de que Linesur desembarque en la empresa de los autobuses y asuma la deuda existente (que sobrepasa los 25 millones de euros), pero también recalcó que «ya no podemos perder el tiempo, y si esta operación no pudiera ser el Ayuntamiento habrá hecho los deberes y tendrá más que estudiada la fórmula para rescatar el servicio y poner en orden la situación».

Y es que el mal funcionamiento del servicio, el pésimo estado de la flota de autobuses y los continuos impagos que han provocado la convocatoria de una huelga de siete semanas a partir del día 7 de junio son motivos más que suficientes para no dilatar más la solución de este conflicto.

IU pide la gestión directa

Por su parte, el concejal de IU, Joaquín del Valle, insistió ayer que «el transporte público es un servicio básico para la ciudadanía y una de las claves para hacer de Jerez una ciudad más habitable y sostenible». Por tanto, una de las propuestas que ha incluido en su Plan de Viabilidad alternativo, y que debatió el lunes con el comité de empresa de Cojetusa -que ayer seguía sin tener noticias oficiales sobre el futuro de la empresa y de la concesión del servicio-, es la apuesta por la gestión directa por parte del Ayuntamiento del transporte urbano, lo que daría «estabilidad en el empleo y una mayor calidad en la prestación del servicio».

Además, según sus cálculo esta medida supondría un ahorro anual de más de 2,5 millones de euros para las arcas municipales -en la actualidad cuesta más de 10 millones de euros-, ya que el gasto para el funcionamiento de estos servicios a través de empresas concesionarias implica el coste real del servicio más el beneficio industrial que quiere obtener la propia compañía.