crisis política

El presidente del Líbano acepta la dimisión del Gobierno

La UE advierte que percibe un aumento de la inestabilidad en el país tras la renuncia de Miqati y los choques en Trípoli

BEIRUT/BRUSELAS Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El presidente libanés, Michel Suleiman, ha aceptado la dimisión del Gobierno del primer ministro, Nayib Mikati, que el viernes anunció su renuncia por discrepancias entre sus miembros, dijeron a Efe fuentes cercanas a la Presidencia. El mandatario ha pedido a Mikati que siga haciéndose cargo de los asuntos del país hasta que se designe un nuevo primer ministro.

Mikati se trasladó esta mañana al Palacio Presidencial de Baabda para presentar por escrito la dimisión. Poco después, a su salida de palacio, el jefe de Gobierno dimisionario explicó a la prensa que el Ejecutivo ha tomado la decisión por sí solo y no ha recibido presiones de dentro del país ni del exterior. "Espero que esta dimisión abra la vía a una solución política", señaló.

Mikati consideró primordial la reanudación del diálogo nacional y la formación de un Ejecutivo de Salvación "en este periodo especialmente difícil". Se espera que Suleimán comience a mediados de la próxima semana consultas con el Parlamento para formar un nuevo Gabinete. Anoche, tras la dimisión del Gobierno, se reanudaron los choques en la ciudad septentrional de Trípoli, donde una calma precaria reinaba esta mañana.

Las diferencias dentro del Ejecutivo de Mikati sobre la celebración de elecciones legislativas, previstas para el próximo 9 de junio, y la prórroga del mandato del jefe de la Policía, general Ashraf Rifi, han sido las causantes de su dimisión. El Gabinete ha sido incapaz de alcanzar un consenso para constituir una comisión electoral que supervisara los comicios, ya que el grupo chií Hizbulá quiere que se alargue el mandato del Parlamento actual, donde tiene la mayoría.

Esa organización, por otro lado, rechaza que se prorrogue al general Rifi frente a la jefatura de la Policía, porque lo considera cercano a la oposición antisiria. Mikati fue designado jefe del Ejecutivo el 25 de enero de 2011 tras la caída del Gobierno encabezado por Saad Hariri y obtuvo el cargo gracias al apoyo de una coalición liderada por Hizbulá. Su gabinete estaba integrado por ministros cercanos ese grupo chií y por titulares "neutrales", próximos a las posturas del presidente y del líder druso Walid Yumblat, que trataban de lograr un equilibrio y no contrariar a la oposición antisiria, dirigida por Hariri.

La UE percibe un aumento de la inestabilidad

Por otro lado la máxima responsable diplomática de la Unión Europea, Catherine Ashton, ha advertido este sábado de que la dimisión anunciada por Nayib Miqati, ha debilitado el escenario político nacional, y pide el fin de los enfrentamientos entre seguidores y críticos del presidente sirio, Bashar al Assad en Trípoli. "La Alta Representante expresa su preocupación por el deterioro de la situación en Líbano, particularmente tras la dimisión del primer ministro", declaró Ashton a través de un comunicado de su oficina.

Ashton "pide a todas las partes que se contengan y cooperen en aras del diálogo, así como el respaldo para el trabajo de todas las fuerzas de seguridad, entre ellas el Ejército, para mantener la calma". La presencia de miles de refugiados sirios en Líbano tras escapar de la guerra civil, supone "una pesada carga para el país", en palabras de Ashton, quien no obstante aplaude "el espíritu sin igual de solidaridad y resistencia del pueblo libanés" al aceptar a la población desplazada.

"La Unión Europea", concluye el comunicado, "seguirá manteniendo su respaldo a las instituciones, a las fuerzas de seguridad y al pueblo libanés a la hora de responder a los desafíos actuales".