Sin Wall Street y a la espera del BCE

Europa estaba ayer sola ante el peligro, porque en Estados Unidos se celebraba el Día de la Independencia y la Bolsa de Nueva York cerraba, lo que reduce el volumen negociado y la liquidez en todos los mercados del mundo. Además, se respiraba cierto nerviosismo por la cita de hoy en Europa: la reunión del Banco Central Europeo, que podría llevar consigo una rebaja de los tipos de interés o, también, una reducción del tipo de depósito, para desincentivar a los bancos que dejen el dinero en el BCE y circule. También hay quien se atreve a especular con que la autoridad monetaria adopte más medidas de estímulo, como nuevas inyecciones de liquidez. Pero son palabras mayores. El que sí parece que podría ampliar la cantidad destinada a la compra de activos es el Banco de Inglaterra que también celebra hoy su reunión ordinaria de política monetaria.

Junto a la inquietud sobre lo que al final terminará haciendo el Banco Central Europeo, también se despertaron miedos. Por ejemplo, la publicación del déficit de Italia, que aumentó hasta situarse en el 8% en el primer trimestre de 2012, su nivel más elevado desde 2009. Esa subida se debe, por un lado, al incremento de los costes de financiación y, por otro, a la reducción de los ingresos provocada por la situación de la economía. Este dato, pues, complica el objetivo marcado por el Gobierno italiano de reducir su déficit en el conjunto del año 2012 hasta el 1,7% desde el 3,9% en que cerró el año 2011. Estas cifras sentaron muy mal y ello se observó, sobre todo, en la evolución de la deuda pública. La prima de riesgo de España, que llegó a caer por debajo de los 465 puntos básicos en los primeros cambios, a partir de las nueve de la mañana, comenzó a escalar sin pausa hasta cerrar en los 495 puntos básicos, por encima de los 471 puntos básicos en que había cerrado el día anterior. La rentabilidad del bono a diez años llegó a subir hasta el 6,42% desde el 6,24% en que terminó la jornada anterior.

La prima de riesgo de Italia, que pareció querer caer por debajo de los 400 puntos básicos, terminó la sesión en los 431. La rentabilidad del bono a diez años subió desde el 5,60% hasta el 5,74%.

Malos datos de Alemania otra vez

Para evaluar en su justa medida la evolución de las primas de riesgo en la sesión de ayer hay que tener en cuenta, además, la fuerte caída de la rentabilidad del bono alemán a diez años. Desde el 1,53% hasta el 1,45%. Fue culpa del déficit italiano, pero también de las deprimentes cifras que se publicaron en Alemania y en el conjunto de la zona euro. El índice de gestores de compras del sector servicios alemán cayó por debajo de los 50 puntos contra todo pronóstico. Eso significa que se encuentra en fase contractiva. El de Francia, también, pero su lectura fue mejor de la prevista, al igual que ocurrió en Italia. Con ello, el índice compuesto de la zona euro en que se aglutina la lectura del sector servicios y del sector manufacturero se situó por encima de lo previsto, pero se encuentra por debajo de los 50 puntos, es decir, en contracción, por quinto mes consecutivo. Todas estas referencias, sobre todo las de Alemania, pueden justificar la toma de decisiones más agresivas por parte del Banco Central Europeo.

En Europa también conocimos la evolución de las ventas al por menor de mayo: en comparación interanual el descenso fue de un 1,7%, por encima de la caída del 1% que esperaba el mercado. Además, la cifra del mes anterior se revisó a la baja. En cambio, la lectura intermensual fue favorable: las ventas al por menor crecieron un 0,6%, cuando los expertos esperaban que se mantuvieran estables. También, siguen complicándose las cosas respecto a la situación europea. La CSU (socialcristianos bávaros) rechazan nuevas ayudas a los países europeos y amenazan con la ruptura de la coalición gubernamental en Berlín. Al menos, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble, defendió los resultados de la cumbre.

Y más piedras en el camino: es posible que se retrase hasta el 20 de julio la presentación del memorándum, es decir, de las condiciones al rescate de la banca española, algo previsto, en principio, para la reunión de los ministros de Finanzas del próximo día 9. Todo este cóctel provocó que el euro se depreciara hasta poner en peligro el nivel de 1,25 dólares, nivel desde el que intentó rebotar.

El índice italiano, el que más cayó

En Bolsa, el índice que más sufrió fue el Ftse Mib de Milán, que registró una revalorización del 0,78%. A continuación, el Ibex-35, que se dejó un 0,71%, para dar un último cambio en los 7.168,50 puntos. El Dax alemán, por su parte, perdió un 0,20%, mientras que el Cac 40 francés retrocedió un 0,11%. En verde, el PSI-20 de Lisboa, que se apuntó un 1,06%, inmune a todos los problemas del resto de Europa.

En el selectivo español, Sacyr lideró los ascensos, con una revalorización del 4,15% después de anunciar la venta del 45% de la Autovía del Arlanzó por 106,6 millones de euros a un fondo participado por el ICO. A continuación se colocó Indra, que ganó un 4,05%. Entre los mejores, BME, CaixaBank y Bankia, que se apuntaron más de un 2%. ¿Le puede beneficiar a Bankia ahora que su consejo de administración anterior vaya a los tribunales? ¿Implica garantías para el accionista actual? ¿Se puede ver resarcido de las fuertes caídas que ha sufrido desde la salida a Bolsa, especialmente desde el descubrimiento de su agujero y su nacionalización? Además de estas entidades financieras, también el Sabadell cerró al alza. El resto terminó la sesión en rojo. El banco que más cayó fue BBVA, que retrocedió cerca de un punto porcentual. Bankinter, por su parte, recortó un 0,37%, mientras que el Santander y el Popular perdieron un 0,28% y un 0,11%, respectivamente.

Volviendo a los valores en verde, las subidas de Ferrovial, Mediaset, Abertis y Repsol superaron el punto porcentual. En negativo, el valor que más cayó fue Acerinox, que retrocedió algo más de un 2%, mientras que Gamesa, Técnicas Reunidas y Red Eléctrica cayeron más de un 1%. Otros grandes valores también terminaron la sesión en negativo. Por ejemplo, Iberdrola se dejó un 0,93%, mientras que Telefónica perdió cerca de medio punto porcentual.

Fuera del Ibex, comportamientos raros de varios valores. Sobre todo en la cabeza de la tabla. Biosearch y Natraceutical se dispararon un 50% y un 25%, respectivamente, sin que hubiera noticias que justificaran esos movimientos. Pero esas fuertes subidas ¿pueden anticipar la posibilidad de que haya movimientos corporativos? GAM y Natra subieron más de un 10%. Los peores valores fuera del selectivo fueron Solaria, que retrocedió un 7,61%, además de Renta Corporación y Adolfo Domínguez, que se dejaron más de un 5%.

En el mercado de materias primas también se impuso la recogida de beneficios. El barril de Brent, de referencia en Europa, bajó cerca de un punto porcentual, con lo que cayó de nuevo por debajo de los 100 dólares. También se impusieron los descensos en el cobre y en el oro, pero en este último caso, la onza se mantenía por encima de los 1.600 dólares.