situación límite en siria

Una explosión deja 30 muertos en un funeral en Damasco

Un vehículo ha estallado durante el sepelio celebrado por la muerte de un ciudadano en las protestas antigubernamentales

EL CAIRO Actualizado: Guardar
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Al menos 30 personas han muerto por la explosión de un vehículo durante un funeral en la localidad de Zamlaka, en las afueras de Damasco, según han denunciado los grupos opositores sirios. Los Comités de Coordinación Local y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos han informado de al menos 30 fallecidos por el estallido, mientras que la Comisión General de la Revolución Siria ha situado la cifra de muertos entre 20 y 30. Según las organizaciones opositoras, hay centenares de heridos y muchos cadáveres yacen todavía en las calles.

Las circunstancias del ataque son aún confusas: mientras que la Comisión ha señalado que se trató de un atentado perpetrado por las fuerzas gubernamentales y "shabiha", milicianos prorrégimen, con un coche bomba; el Observatorio ha señalado que el vehículo estalló por el impacto de un proyectil de mortero.

El funeral se celebraba por la muerte de un ciudadano en las protestas antigubernamentales, identificado por los Comités como Abdulhadi al Halabi. Los grupos de la oposición agregaron que el régimen bombardeó hoy las localidades de Duma y Arbin, en las inmediaciones de la capital, mientras que en el municipio próximo de Hamuriya hubo un gran desplazamiento de ciudadanos, en medio de los disparos de los leales al presidente Bachar al Asad, por temor a los ataques de artillería.

Nuevo baño de sangre

La Comisión ha precisado que Duma está siendo bombardeada con morteros y es blanco de los tanques del ejército, y que los helicópteros militares disparan contra todo lo que mueve en Arbin. Los opositores también han informado de la represión de las fuerzas del régimen en la provincia central de Homs y en Deir Zur, en el este. La Comisión ha destacado que en la localidad de Al Rastan, en Homs, los hombres de El-Asad bombardean los depósitos de agua potable.

Según los opositores, decenas de personas han muerto en distintas provincias de Siria, la mayoría por disparos de las fuerzas gubernamentales. La Comisión ha indicado que al menos 66 personas perecieron, mientras que el Observatorio situó la cifra de bajas en 42 y los Comités, en 85. Estas informaciones no han podido ser verificadas de forma independiente debido a las restricciones impuestas por las autoridades sirias a los periodistas para trabajar.

Estos sucesos coinciden con la reunión en Ginebra del llamado Grupo de Acción para Siria, que ha acordado proponer la creación de un "órgano de transición gubernamental", con participación del Gobierno de El-Asad y los grupos de la oposición, como elemento clave para la pacificación del país. Mañana y el lunes se espera que las organizaciones de la oposición se reúnan en El Cairo, bajo los auspicios de la Liga Árabe, para aunar posturas.