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Los inmuebles heredados por los Príncipes, valorados en 1,6 millones de euros

Es la tasación realizada por la Hacienda Pública de Baleares y un experto independiente sobre el patrimonio legado por el empresario Balada

MADRID Actualizado: Guardar
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Los inmuebles que el empresario menorquín Juan Ignacio Balada dejó en herencia a los Príncipes de Asturias y a los ocho nietos de los Reyes tienen un valor de 1,6 millones de euros, según la tasación realizada por la Hacienda Pública de Baleares y un experto independiente, ha informado la Casa Real.

Balada, fallecido el 18 de noviembre de 2009, decidió destinar su herencia, de unos 10 millones de euros, a los Príncipes y a los ocho nietos de los Reyes. Esa herencia incluía varios bienes inmuebles de los que se desconocía hasta la fecha su valor real, tasado finalmente en 1.647.898, 64 euros.

Se trata de un local comercial explotado como cafetería, siete pisos y una finca rústica. Estos inmuebles se han repartido ya entre los Príncipes y los nietos de los Reyes. Los niños se quedarán con la antigua residencia de Balada. La intención de sus tutores es venderla "más adelante", mientras que la Fundación Hesperia que los Príncipes crearon con su parte de la herencia será la propietaria del resto de los inmuebles.

El Palacio de la Zarzuela también ha concretado que la Hacienda de Baleares ha ingresado 3,3 millones de euros por el pago del correspondiente Impuesto de Sucesiones en relación con la herencia de Balada.

El empresario, al que la Familia Real no conocía, dispuso en su testamento que la mitad de su herencia debía dirigirse a los Príncipes, a quienes encargó que crearan con ese dinero una Fundación para apoyar a la institución monárquica a través del fomento de las ciencias y las artes, pero cuyos fines concretos dejaba a elección de Don Felipe y Doña Letizia.

Los Príncipes constituyeron en 2010 la Fundación Hesperia, destinada a financiar y promover proyectos sociales y al apoyo a la juventud, y que contó con un patrimonio fundacional de cuatro millones de euros. En 2011 la fundación financió con un importe total de 275.000 euros cuatro programas dirigidos a jóvenes discapacitados; menores que han abandonado los estudios; niños procedentes de familias con pocos recursos económicos y a la investigación de enfermedades raras.

Beneficiarios de los proyectos

La Casa Real ha anunciado que en 2012 la Fundación Hesperia invertirá otros 75.000 euros entre tres proyectos, que recibirá cada uno 25.000 euros. Los beneficiados son la Fundación Once, para un programa con sordociegos; el Ayuntamiento de Lorca, para reparar un colegio de atención a deficientes físicos y psíquicos y de nuevo, como en 2011, la doctora Aurora Pujol para que siga investigando la enfermedad de la 'adrenoleucodistrofia', que provoca la muerte prematura en niños.

La otra mitad de la herencia debía repartirse a partes iguales entre los Príncipes y los ocho nietos de los Reyes, por expreso deseo del empresario. El patrimonio de Balada lo formaban bienes inmuebles en la isla de Menorca, el 100% de la sociedad Adalab, valores mobiliarios cotizados en bolsas y depósitos de dinero en bancos.

Tras el pago de los correspondientes impuestos y sin contar el valor de los bienes inmuebles, Don Felipe, Doña Letizia y los ocho nietos de los Reyes recibieron cada uno alrededor de 70.000 euros netos. Los Príncipes donaron su parte a la Fundación para Personas Discapacitadas de la Isla de Menorca (FPDIM). En el caso de los nietos de los Reyes, como son menores de edad, su parte no se puede donar sin autorización judicial, por lo que ellos decidirán qué harán con el dinero cuando alcancen la mayoría de edad.

A estos 70.000 euros, se une ahora la tasación de los bienes inmuebles. Los nietos de los Reyes, por tanto, recibirán en torno a 82.000 euros de la herencia, más la parte correspondiente una vez que se venda el antiguo domicilio de Balada.

A los Príncipes les corresponden unos derechos hereditarios sobre los bienes inmuebles de 165.000 euros, que han donado a la Fundación Hesperia, que se queda con el resto de los inmuebles, sobre cuyo destino la entidad "tomará las decisiones que cree convenientes atendiendo a los fines sociales que persigue, teniendo presente la especial vinculación que tiene con la isla de Menorca", avanza Zarzuela. Algunos de estos inmuebles están alquilados pero es voluntad de la Fundación Hesperia respetar en sus derechos a los actuales arrendatarios.