Clinton advierte del riesgo de aparición de una «tormenta perfecta» de protestas en el mundo árabe

La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, ha expresado hoy su preocupación ante la posibilidad de que las protestas registradas durante las últimas semanas en el mundo árabe se retroalimenten entre sí hasta tal punto que desemboquen en una "tormenta perfecta", concentrada particularmente en Oriente Próximo. "El estatus quo no es sostenible", ha afirmado la secretaria de Estado durante su comparecencia en la Conferencia Internacional de Seguridad que se está celebrando en la ciudad alemana de Múnich.

"La región está siendo sacudida por una tormenta perfecta conformada por poderosas tendencias" que "han sacado a los manifestantes a las calles de Túnez, El Cairo y otras ciudades de la región", ha indicado Clinton, quien ha insistido en la necesidad de actuar para conseguir una democracia "deliberada, integral y transparente" como "mejor antídoto para atajar la tensión".

La máxima responsable de la diplomacia estadounidense, que el pasado jueves pedía al Gobierno egipcio el inicio de "serias negociaciones" con oposición y sociedad civil de cara a avanzar en reformas democráticas, ha aprovechado la ocasión para advertir a "algunos líderes de la región de que "se equivocan al creer que son inmunes" al peligro que corre la estabilidad de sus regímenes.

El apoyo de Merkel

A su vez, la canciller alemana, Ángela Merkel, ha garantizado el apoyo de la Unión Europea (UE) a los cambios que se avecinan en los países del norte de África y al actual movimiento de protesta en Egipto. "En Egipto habrá cambios", ha afirmado la canciller alemana durante su intervención en la Conferencia de Seguridad de Múnich. La jefa del Gobierno alemán ha señalado que esos cambios deben tomar forma y ha subrayado que la UE está dispuesta a apoyar el proceso de transición.

Asimismo, ha declarado que es "absolutamente necesario" defender los derechos de libertad del pueblo egipcio y se ha mostrado satisfecha por el hecho de que las protestas en aquel país se desarrollen de nuevo de manera pacífica.

La política cristianodemócrata ha subrayado que la política exterior debe guiarse siempre por los Derechos Humanos, aunque ha reconocido que el modelo de democracia occidental no es exportable a todas las regiones del mundo. Pese a todo, ha comentado que existe "una línea roja" que no se debe traspasar y que está marcada por los Derechos Humanos universales que determina la Carta de las Naciones Unidas.

Necesidad de socios

En su intervención en Múnich, la canciller alemana ha destacado igualmente que la Alianza Atlántica y Occidente no pueden ya solos ayudar a resolver los numerosos conflictos en el mundo. "Necesitamos socios en el mundo. Y para conseguirlos debemos esforzarnos cada vez más", ha dicho Merkel. Tampoco el terrorismo internacional puede ser combatido eficazmente si no colaboramos con socios fuera de la Alianza, ha afirmado la canciller, a la vez que ha subrayado la creciente importancia de los países emergentes, también en cuestiones de seguridad.

Por otra parte, la jefa del Gobierno germano ha indicado que cada país de la Alianza Atlántica debe responsabilizarse de protegerse y defenderse ante posibles "ciberataques". En ese sentido, ha dicho que, como todas las acciones militares del siglo XXI, la lucha contra los ataques a través de internet debe estar incluida en el concepto de la seguridad. Tras afirmar que "ya no nos enfrentamos a la amenaza militar clásica", Merkel ha comentado que el concepto de la disuasión, que tiene su origen en la ya desaparecida Guerra Fría, ha sobrevivido ampliamente.