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Los recortes llegan al Pentágono

El Departamento de Defensa sufrirá un ajuste en los próximos cinco años de 78.000 millones de dólares

WASHINGTON Actualizado: Guardar
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El secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, ha anunciado que su Departamento sufrirá un recorte en los próximos cinco años de 78.000 millones de dólares, además de los 100.000 millones que serán dirigidos a otros programas militares.

El presidente del Comité de Fuerzas Armadas de la Cámara de Representantes, Howard McKeon, ha explicado que los nuevos recortes son más dramáticos de lo que esperaban las compañías del sector de defensa. "No estoy contento", ha reconocido. En Estados Unidos, el Congreso es en última instancia el órgano que controla el presupuesto del Departamento de Defensa y podría no apoyar los recortes previstos por el ministro de Defensa.

Gates comenzó su campaña para ahorrar 100.000 millones de dólares en mayo pasado para asegurar la financiación para las tropas y la modernización. El titular de Defensa estadounidense se encuentra, en la actualidad, bajo presión de la Casa Blanca para conseguir más ahorro presupuestario. El recorte extra de 78.000 millones de dólares implica que se podrían suspender nuevos programas de armas, mientras Gates intenta cancelar contratos de menor prioridad y recortar costes elevados.

El Congreso tendrá la última palabra

En conferencia de prensa, Gates ha asegurado que el Pentágono reducirá y consolidará algunas operaciones de inteligencia y que recortará 100 puestos de funcionarios. Los parlamentarios a menudo bloquean los intentos del Gobierno de cancelar costosos programas de armas cuando suponen empleos remunerados en los estados que representan.

Un ejemplo de esta actitud de los parlamentarios es la situación del programa del avión de combate F35 de la compañía Lockeed Martin, en el que el Pentágono intentó durante cinco años suspender el desarrollo de un motor alternativo por parte de General Electric y la británica Rolls-Royce y los legisladores se negaron a abandonar el proyecto. Gates ha señalado que la variante del motor necesita ser rediseñada y ha establecido un período de prueba de dos años, tras el que, si no hay progresos, será cancelado.

El secretario de Defensa también ha apuntado que la Fuerza Aérea comprará más aviones no pilotados y que está trabajando en un bombardero nuclear de largo alcance. Además, el Ejército de Tierra comenzará a trabajar en helicópteros no pilotados y el Pentágono comprará interceptadores de largo alcance para la defensa de misiles y avanzados sistemas de radar. Según Gates, el presidente pedirá un presupuesto de 553.000 millones de dólares para el Pentágono para 2012, lo que supone un aumento de un 3% con respecto a las cuentas de 2011.