Periodistas parlamentarios por un día

La voz de un grupo de niños y niñas, de entre doce y trece años, procedentes de Latinoamérica, se ha escuchado hoy en el Congreso de los Diputados, para trasladar los parlamentarios la problemática del trabajo infantil en el mundo y debatir sobre sus posibles soluciones.

Doce de ellos, llegados a Madrid desde Colombia y Uruguay como ganadores del concurso de periodismo on-line 'Hoy Escolar', impulsado por la Fundación Telefónica y el grupo Vocento, han visitado sus instalaciones y se han convertido en pequeños periodistas por un día ante los políticos españoles.

¿Conocen bien el problema del trabajo infantil en el mundo? o ¿qué diferencia existe entre las condiciones de vida de los más pequeños entre España y América Latina? han sido algunas de las cuestiones planteadas por los niños a José Antonio Alonso (PSOE), Soraya Sáez de Santamaría (PP), Josu Erkoreka (PNV) y Josep Sánchez Llibre (CiU).

Antes, el presidente del Congreso, José Bono, los ha recibido en el Hemiciclo para explicarles la historia del Parlamento y la actual disposición de los políticos en los escaños. Bono les ha explicado, además, que el próximo 24 de septiembre España cumplirá doscientos años de vida parlamentaria y les ha recordado que, en sus inicios, participaban en ella también diputados "procedentes de las américas".

Preocupados por la explotación infantil

Una vez en la sala de presa, los niños han planteado a los portavoces parlamentarios cuestiones acerca de un problema que afecta a 215 millones de menores en el mundo. La elevada cifra de niños que sufren explotación laboral, extraída del último informe realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ha sido calificada por los políticos de "fracaso colectivo" y de "desastre", si se tiene en cuenta que de 2004 a 2008 apenas se ha conseguido reducir en un tres por ciento.

La OIT calcula que sólo en el área de América Latina y El caribe trabajan 5,1 millones de niños, lo que supone un 2,4 por ciento del total mundial. Por eso, los pequeños latinoamericanos se han preocupado por saber qué se podría hacer en sus países para que todos los niños tuvieran acceso a una infancia como la de ellos, durante la que no sólo pudieran estudiar sino también jugar.

Los cuatro portavoces han coincidido en señalar como fundamental la cooperación al desarrollo entre los países del "primer mundo" y aquellos en los que todavía no se respetan los derechos humanos fundamentales. En general, han expresado la necesidad de ayudar a mejorar las economías de los países más débiles, repartir más equitativamente la riqueza en el mundo y, sobre todo, la obligación de cumplir las leyes "que ya existen a nivel internacional".

Han coincidido también en señalar la actividad de algunas empresas, que utilizan a niños para fabricar sus productos, como una de las principales causas de la explotación infantil. En la particular rueda de prensa también ha habido momentos distendidos en los que, por ejemplo, los parlamentarios han tenido que explicar a qué edad empezaron a trabajar y cómo ganaban "un dinerillo extra" en su juventud para poder "escaparse de vacaciones con sus amigos". Antes de concluir, han sido obsequiados por los pequeños con artesanías típicas de Uruguay y Colombia.