La provincia empieza la temporada alta turística con un «lleno técnico»

Los hosteleros, ya se sabe, son como los agricultores, los comerciantes de ropa o calzado, como los farmacéuticos, en definitiva como cualquier persona que tenga un negocio propio; muy cautelosos a la hora de expresar su alegría cuando las cuentas de resultado van bien. Pero tras el repunte de la afluencia turística en los últimos dos años, una vez superado el gran mazazo de la crisis de 2008, es difícil que el empresariado gaditano logre esconder la esperanza de la recuperación absoluta.

El verano pasado por estas mismas fechas los hosteleros celebraban el regreso del turista nacional a nuestras costas tras años de recesión y de contención en el gasto. Hoy nadie espera que este viajero vuelva a desaparecer de las reservas hoteleras y se cuenta además con la riada de viajeros desplazados desde destinos que sufren conflictos políticos y sociales o el zarpazo del terrorismo internacional, como le ha ocurrido a Turquía, Egipto, Túnez o Francia.

A la coyuntura política internacional se suma que las costas españolas –también las gaditanas– se verán beneficiadas por los daños colaterales causados por el Brexit, que ha generado suficiente incertidumbre económica como para que viajeros de otras nacionalidades europeas posterguen una visita a Reino Unido, pendientes de la previsible devaluación de la libra, cuando se haga efectiva la salida de la Unión Europea.

En este contexto, si el presidente de los hoteleros, Stefaan De Clerck, aseguraba en junio de 2015 que durante le pasado verano se superaría el 90% de ocupación media de la planta hotelera provincial, que alcanza las 50.000 plazas, este año eleva el porcentaje al 95%. Cinco puntos más para y a solo otros cinco de cerrar todas las reservas a finales de junio. De Clerck hace referencia a que incluso en los hoteles de interior, como Jerez (o segunda línea de playa) se prevén estos estupendos resultados aunque lleguen un poco más tarde, por rebosamiento de la costa gaditana.

Desde Sancti Petri (Chiclana), donde se encuentra la mayor planta hotelera de playa de la provincia, el director comercial de Hipotels, Dushan Ocepek, se muestra feliz con el desarrollo de las reservas para esta temporada alta, ya que tienen «casi, casi todas la habitaciones vendidas». Aunque prefiere hablar de «lleno técnico», para indicar que aún quedan algunas (pocas) plazas libres en algunos alojamientos de la costa gaditana. Dejando «siempre la puerta abierta» para quienes logren una habitación por cancelación de última hora o cualquier otra circunstancia especial.

El director comercial de Hipotels en la provincia de Cádiz prefiere apuntar que este destino no necesita en temporada alta atraer a más turistas internacionales para la planta hotelera actual. «Creo que no nos hace falta nada más en verano. Y espero que no nos ocurra nada parecido a lo que le ha pasado a los ciudadanos en Turquía (refiriéndose al reciente atentado en el aeropuerto de Estambul, que acabó con la vida de 41 personas)», apunta Ocepek, quien señala que tampoco cree que «la costa de Cádiz sea un destino refugio de última hora. Es más lógico que las Islas se vean beneficiadas por conflictos bélicos, atentados terroristas o inseguridades ya sean políticas o económicas».

La diputada de turismo en Cádiz, Mari Loli Varo, realiza una valoración muy positiva de esta temporada alta que acaba de comenzar. «Las perspectivas que tenemos para este año son muy positivas. Nos basamos tanto en los datos que nos ofrecen los empresarios del sector, como en los que ofrecen otras administraciones, además de las diversas estadísticas oficiales», apunta Varo. Y recuerda que en la asamblea anual de la patronal hotelera de la provincia de Cádiz Horeca, celebrada en junio, «tanto empresarios como políticos coincidieron en destacar que la presente será una estupenda temporada alta para el turismo gaditano, puesto que en junio tenían vendidas casi todas las plazas hoteleras hasta septiembre».

Según los últimos datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística, en los primeros cinco meses de 2016 la provincia ha superado los 800.000 turistas y los dos millones de pernoctaciones. «Esto indica que ya los datos del inicio de año son mucho mejores que los del anterior. Nosotros trabajamos para que la temporada alta se prolongue lo más posible pero nadie duda de que el grueso de turistas viene ahora, en los meses de julio a septiembre», resume la diputada de Turismo.

Por su parte, la propia patronal Horeca ha publicado hace un par de días unas previsiones de ocupación al alza. En la primera quincena de julio prevén una subida de 2,5 puntos, considerando que la ocupación real del 1 al 15 de julio de 2015 fue del 81,24%, los empresarios prevén para esta que comienza ahora una ocupación del 83,70%. En la segunda, el ascenso supera los 12 puntos, pasando del 73,26% al 85,38% esperado para la segunda quincena de este mes de julio.

En cuanto al empleo

Pero cómo afecta esta mayor afluencia de viajeros a los gaditanos. Cómo les beneficia. Es fundamental que dicha actividad turística genere empleo. En este sentido las expectativas de contratación para este temporada alta turística también son optimistas. Las consultoras de recursos humanos Adecco y Randstad prevén que el sector servicios de la provincia de Cádiz sume entre junio y septiembre 37.000 nuevos contratos. El pasado año ya se contabilizaron unos 30.715 nuevos contratos, nada que ver con las cifras de años anteriores cuando a duras penas se firmaban 4.000 contratos en verano.

En el panorama nacional, el optimismo ya es generalizado. En el último informe de la consultora especializada en turismo Deloitte, España podría alcanzar al cierre de 2016 los 70 millones de turistas. Esta actividad turística supone para España en torno al 10,2% del PIB y crea más del 11% del empleo en el país. Para este crecimiento pronosticado será decisivo que se mantenga el actual entorno geopolítico que ha trasladado a cerca de 800.000 turistas a España procedentes de los países en conflicto ya citados, según señala Exceltur (Liga por la Excelencia Turística, en la que se encuentran las principales marcas del sector nacional, como Iberia, Meliá, NH, Renfe, RIU, entre otras muchas).