opinión

Cuestión de prioridades

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Ahora que los Reyes Magos acaban de recorrer las ciudades españolas para dejar sus regalos a los pequeños de la casa, no está de más recordar que el mejor regalo que podemos hacer a nuestros niños es darles la mejor formación posible. Sin embargo, aunque a todos se nos llena la boca con esa máxima, los datos demuestran que, en la práctica, ese interés por la educación varía entre las distintas Comunidades Autónomas que, como todos sabemos, son las que tienen las competencias en todo lo que se refiere a inversión educativa en nuestro país. Resulta así que la mejor herencia posible para las nuevas generaciones no despierta la misma preocupación, ni es objeto de la misma prioridad, según donde vivamos y que, en ese reparto, no es lo mismo asistir a la cabalgata de Reyes en la avenida de Cádiz, en la calle Goya de Chiclana o en la Plaza de la Campana de Sevilla que hacerlo en el Paseo de San Francisco de Badajoz o en el Muelle Viejo de Palma de Mallorca. Porque, por mucho que los responsables educativos de nuestra Comunidad proclamen, con diversos eslóganes, la defensa a ultranza de la formación pública de calidad, el hecho experimental es que la Junta de Andalucía, en sus presupuestos del 2014, ha llevado a cabo un recorte del 2,3% para esa educación pública que tanto defiende de boquilla. Un recorte que se suma a la reducción del 8,6% que ya se llevó a cabo en el año 2013 y que contrasta, tal como se ha hecho público en un informe oficial de la semana pasada, con los incrementos aprobados en la mayoría de las restantes Comunidades Autónomas. Por ejemplo, Baleares, que aumenta su inversión en educación un 2,2%, curiosamente el mismo porcentaje que Andalucía recorta, pero también Extremadura, Cantabria, Castilla-León, La Rioja, Valencia y un largo etcétera de regiones han incrementado sus presupuestos educativos para este nuevo año. Cierto es que, en esto de los recortes en fondos públicos para educación, solo Cataluña tiene el dudoso honor de ganarnos, pero ya todos sabemos lo que centra la prioridad presupuestaria de la Generalitat para este ejercicio. Está visto, también, que la Junta de Andalucía tiene otras prioridades. Esperemos que, al menos,