El meteórico ascenso del Club Voleibol Puerto Real

La historia del Club Voleibol Puerto Real se puede resumir con la palabra éxito. Debería de ir en mayúsculas, porque los puertorrealeños fundaron el equipo en 2001. Hace ocho años. Comenzaron en la Segunda División Andaluza. En 2009, jugaran en la máxima categoría del voleibol nacional: la Superliga.

La próxima temporada se codearán con los mejores, pero el jugador José María Bellido recuerda cuando hace ocho años dejó el CV Amigos Cádiz para jugar en un conjunto de reciente creación en Puerto Real. «Muchos me dijeron que era una barbaridad, que estaba loco, pero yo era de Puerto Real y me venía mejor para compaginar mis estudios con el deporte. Nunca me imaginé que jugaría en primera división», explica.

Bellido sabe que tendrá difícil contar con minutos en la Superliga, donde el nivel de los jugadores es inmejorable, pero espera recibir la recompensa de estar al menos con el equipo. «Será mi último año. Ya esta temporada he jugado poco, pero es algo normal. Me siento igual de orgulloso y feliz por el ascenso. He vivido cuatro en ocho años, es para estar contento», dice.

Gran parte de la culpa de que el equipo vaya a jugar la próxima temporada la tiene Miguel Ángel Serrano. El entrenador puertorrealeño llegó tras la cuarta jornada para dar un vuelco al ánimo de una plantilla que se confeccionó con la intención de ascender de categoría. «Al principio costó trabajo. Los jugadores tuvieron que adaptarse a muchas cosas, pero han realizado un trabajo muy bueno y tras la Navidad, y con las incorporaciones de Rayco Hernández César Castro, el equipo empezó a ganar partido tras partido y hasta ahora», recuerda.

Serrano cree que la temporada ha tenido dos momentos claves. «Cuando ganamos al Caravaca en su casa cogimos mucha moral y se la quitamos a ellos. Cuando perdimos en Andorra nos preocupamos, pero ahora sólo pensamos en ganar el último partido y ser campeones», afirma convencido.