Tapas que suenan a copla

Cada una de las cuarenta tapas que componen la extensa carta de Se llama Tapa tiene nombre de una copla de canción española. Es la original propuesta de este bar que acaba de abrir en la calle Victoria de Puerto Real, en una pequeña bocacalle del Paseo Marítimo y muy cerca del edificio del Ayuntamiento de la localidad. La oferta es de lo más variada y se pueden encontrar propuestas como Ay pena, penita, pena que son en verdad unas patatas a lo pobre o Encrucijada, un crujiente de puerros, con langostinos, queso y bacon o Sierra de Luna que es un gallo guisado con langostinos y jamón. Así, hasta cuarenta nombres de copla que representan las diferentes tapas del local. Todas llevan una cuidada presentación y se pueden degustar tanto en la terraza como en el salón con capacidad para unas treinta personas y que dirije Juan Carlos Ramirez, de 19 años. La carta incluye también postres realizados en la propia cocina del local que está a cargo de Raúl Ardila Zaldivar, de 27 años y formado en El Balandro y El Gordo La Marina de Puerto Real y Isabel María Camerino, de 21, alumna de la Escuela de Hostelería de Cádiz. La última de las creaciones de estos jóvenes cocineros ha sido un pez espada al orégano.

EL BALANDRO NAVEGA HASTA LA AVENIDA, 28

Avenida 28 es la nueva propuesta de el grupo El Balandro, regentado por la familia Vélez y que tiene ya establecimientos en la ciudad de Cádiz y en Puerto Real con Albarizuela. Ahora acaban de inaugurar una nueva propuesta en la avenida Ana de Viya, 28, en el local que ocupaba el Nuevo Almacén. La propuesta de los Hermanos Vélez es bastante novedosa ya que incluirá desayunos, meriendas y el tapeo al mediodía y por la noche. Para los desayunos y meriendas se proponen, además de la oferta de diversos tipos de pan y de bollería, los emparedados, unos bocadillos, hechos con pan de molde, rellenos de diversas cremas realizadas por José Francisco Vélez, el creador de la empresa. La idea, dicen, es ir cambiando a diario los rellenos de los emparedados para ofrecer una oferta distinta y que permite cubrir tanto las necesidades de los desayunos, como el bocadillo de media mañana o la merienda. También estarán disponibles al mediodía y por la noche como tapas. En cuanto a la oferta para almuerzos y cenas está se basará en las tapas de El Balandro como su conocida ensaladilla de pulpo a la gallega o la ensalada de ahumados y palmitos. También incluyen postres.

DOCE CAPRICHOS DE CHOCOLATE EN EL FARO DE EL PUERTO

El restaurante El Faro de El Puerto ofrecerá hasta el próximo día 20 de marzo una original propuesta en la que colabora la firma gaditana Chocolates Pancracio. El restaurante que dirije Fernando Córdoba ha diseñado una carta de postres que tienen como protagonista al chocolate. Los postres, todos a un precio de 9 euros, se podrán degustar en los almuerzos y cenas del restaurante, pero la novedad será que el público podrá ir al restaurante sólo a tomar postres y en horario de almuerzos o de cenas, pero también a la hora de la merienda en la que estará disponible en el establecimiento esta singular carta. Las propuestas van desde un pan de torrija con frutos rojos con un sorbete de chocolate blanco al tomillo-limón a unos macarrones de chocolate rellenos de trufa y pistachos sobre puré de frambuesas.

LA ABUELA ROSARIO EN PUERTO REAL

Isabel María Rosendo comenzó a trabajar como administrativa pero se dió cuenta de que no era lo suyo. Su vocación estaba clara. Su madre, Rosario Jiménez Collantes, le había enseñado el secreto de muchos guisos de toda la vida y por si fuera poco la cocina la tiene también muy presente a través de su hijo, Jesús Colorado, formado en la Escuela de Hostelería Fernando Quiñones de Cádiz y ya convertido en segundo jefe de partida en las cocinas de Martín Berasategui. Asi que, después de estudiar ella también Cocina en la escuela Fernando Quiñones, se ha decidido a dar el paso definitivo y acaba de abrir el Mesón de la Abuela Rosario en la calle San Francisco, 74 de Puerto Real (Teléfono:956472325). El nombre lo ha puesto en honor a su madre de la que ha heredado recetas como el bizcocho bañado en leche que mantiene como uno de los postres del establecimiento. El local, situado frente a la antigua estación de tren de Puerto Real, tiene un salón interior y un patio descubierto donde también hay situadas mesas.