Aspecto de la concentración ante la sede de EITB en Bilbao con la pancarta del sindicato ELA de rechazo al atentado de ETA. / EFE
ESPAÑA

El 'comando Vizcaya' usó su explosivo más potente en el atentado de Bilbao

La Policía cree que se trata de los mismos etarras que mataron a un militar en Santoña en septiembre

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ETA usó cien kilos de su más potente explosivo para atentar contra la sede de EITB en Bilbao el 31 de diciembre.

Según el análisis de los técnicos de la Ertzaintza, la furgoneta-bomba estaba cargada con amonitol, una mezcla del clásico amonal (nitrato de amonio y polvo de aluminio) reforzado con nitrometano, el combustible para aeromodelismo del que ETA robó 2.000 litros en octubre de 2007.

La banda viene usando este compuesto explosivo de gran potencia desde febrero de 2008, cuando atentó contra los juzgados de la localidad guipuzcoana de Bergara. El antecesor del actual comando Vizcaya, el talde Askatasun Haizea desarticulado en julio del pasado año, tenía en sus arsenales 125 kilos de este compuesto y había utilizado amonitol en atentados como el del Club Náutico de Getxo (Vizcaya).

Los servicios de Información creen que el ataque de fin de año es obra de ese nuevo complejo Vizcaya que sobrevivió al golpe del pasado verano. Esta estructura está activa, al menos, desde octubre de 2007, y desde entonces ha cometido más de una docena de atentados.

Los especialistas de Interior sospechan que se trata del mismo grupo que en septiembre colocó un coche-bomba en Santoña (Cantabria), cuya explosión se cobró la vida del brigada Luis Conde, y el mismo que unos días antes también trató de matar a un policía nacional de Basauri con un artefacto-lapa en los bajos de su vehículo.

Comando principal

La primera acción que se imputa a esta estructura es el asesinato fallido del escolta Gabriel Ginés con una bomba-lapa en octubre de 2007. El 17 de diciembre de aquel año, este grupo destrozó los juzgados de Sestao con otro artefacto.

El pasado 23 de febrero, el comando Vizcaya abandonó un artefacto-trampa en un repetidor de Bilbao. Luego, en abril, atentaron con potentes explosivos contra las sedes socialistas de La Peña y Elgoibar. En junio vino el ataque contra el diario El Correo. El 20 de julio, este talde comenzó la campaña de verano de la banda con la colocación de cuatro bombas en Cantabria.

En septiembre, la dirección de ETA recurrió a esta estructura para demostrar su fortaleza tras los últimos golpes policiales. En 24 horas, este complejo hizo estallar un coche-bomba frente a la comisaría de Ondarroa y otro vehículo cargado de explosivos en la sede de Caja Vital en Vitoria.

Los expertos policiales creen que los miembros de este grupo, cuyo número no se atreven a cuantificar, cuentan con una buena red de informadores, sobre todo en la zona sureste de Bilbao. En cambio, carecen de una infraestructura de la envergadura que tuvo en su momento el comando desarticulado en verano, capaz de construir y ocultar coches-bomba.