Más de un centenar de escolares conocen el Sáhara a través del teatro

Irene es una niña aventurera que carga en su mochila historias de esperanza, integración y solidaridad. A su corta edad, es el garante de cientos de lecciones que no se aprenden en los libros, si no a través de la convivencia y el ocio. Un personaje de cuento que ayer saltó de sus páginas para escenificar a través del grupo Recuento las condiciones de vida de los menores que viven en los campamentos de refugiados del desierto del Sahara, sus costumbres y danzas.

La cita, enmarcada en la celebración del Día Mundial de los Derechos Humanos, reunió a más de un centenar de escolares en el Palacio de Diputación. Los niños de los colegios San Felipe, María Milagrosa y Campo del Sur disfrutaron con las divertidas anécdotas que Diego y Pipo -Recuento- contaron a cerca de la cultura saharaui.

La inicitiva parte de la ONG Solidaridad Internacional de Andalucía y está respalda por el área de Ciudadanía de la Diputación de Cádiz, dentro de la convocatoria anual de subvenciones para proyectos de sensibilización y educación para el desarrollo.

El director de la ONG, Manuel Martínez, recordó a los alumnos la necesidad de conocer y «comprender» la realidad que se vive en otras partes del mundo para hacerlo un lugar más humano. Ayer al mediodía al menos sabían qué es el Sahara. Ya es un paso.